Gefunden 309 Ergebnisse für: Madre

  • su padre y su madre le agarrarán y le llevarán afuera donde los ancianos de su ciudad, a la puerta del lugar. (Deuteronomio 21, 19)

  • Si encuentras en el camino un nido de pájaros, con polluelos o huevos, sobre un árbol o en el suelo, y la madre echada sobre los polluelos o sobre los huevos, no tomarás a la madre con las crías. (Deuteronomio 22, 6)

  • Deja marchar a la madre, y puedes quedarte con las crías. Así tendrás prosperidad y larga vida. (Deuteronomio 22, 7)

  • el padre de la joven y su madre tomarán las pruebas de su virginidad y las descubrirán ante los ancianos de la ciudad, a la puerta. (Deuteronomio 22, 15)

  • Maldito quien desprecie a su padre o a su madre. - Y todo el pueblo dirá: Amén. (Deuteronomio 27, 16)

  • Maldito quien se acueste con su hermana, hija de su padre o hija de su madre. - Y todo el pueblo dirá: Amén. (Deuteronomio 27, 22)

  • el que dijo de su padre y de su madre: «No los he visto.» El que no reconoce a sus hermanos y a sus hijos ignora. Pues guardan tu palabra, y tu alianza observan. (Deuteronomio 33, 9)

  • que respetaréis la vida de mi padre y de mi madre, de mis hermanos y hermanas, y de todos los suyos, y que libraréis nuestras vidas de la muerte.» (Josué 2, 13)

  • Cuando estemos entrando en el país, atarás este cordón de hilo escarlata a la ventana por la que nos has descolgado, y reunirás junto a ti en casa a tu padre, a tu madre, a tus hermanos y a toda la familia de tu padre. (Josué 2, 18)

  • Los jóvenes espías fueron e hicieron salir a Rajab, a su padre, a su madre, a sus hermanos y a todos los suyos. También hicieron salir a todos los de su familia y los pusieron a salvo, fuera del campamento de Israel. (Josué 6, 23)

  • Vacíos en Israel quedaron los problados, vacíos hasta tu despertar, oh Débora, hasta tu despertar, oh madre de Israel. (Jueces 5, 7)

  • A la ventana se asoma y atisba la madre de Sísara, por las celosías: «¿Por qué tarda en llegar su carro? ¿por qué se retrasa el galopar de su carroza? (Jueces 5, 28)


“Viva feliz. Sirva ao Senhor alegremente e com o espírito despreocupado.” São Padre Pio de Pietrelcina