Gefunden 29 Ergebnisse für: Enseñar

  • a él y Oholiab, hijo de Ajisamak de la tribu de Dan, les ha puesto en el corazón el don de enseñar. (Exodo 35, 34)

  • y enseñar a los israelitas todos los preceptos que Yahveh les ha dado por medio de Moisés. (Levítico 10, 11)

  • Y la gente de la avanzadilla, dirigiéndose a Jonatán y a su escudero, dijeron: «Subid hacia nosotros, que os vamos a enseñar algo.» Entonces Jonatán dijo a su escudero: «Sube detrás de mí, pues Yahveh los ha entregado en manos de Israel.» (I Samuel 14, 12)

  • Porque Esdras había aplicado su corazón a escrutar la Ley de Yahveh, a ponerla en práctica y a enseñar en Israel los preceptos y las normas. (Esdras 7, 10)

  • Del maestro de coro. Según «El lirio del testimonio». A media voz. De David. Para enseñar. (Salmos 60, 1)

  • para enseñar a los simples la prudencia, a los jóvenes ciencia y reflexión, (Proverbios 1, 4)

  • Como pegar cascotes es enseñar al necio, o despertar al que duerme con sueño pesado. (Eclesiástico 22, 9)

  • No te avergüences de enseñar al tonto y al necio, y al viejo acabado juzgado como joven. Serás entonces de verdad educado, y estimado de todo viviente. (Eclesiástico 42, 8)

  • Le hizo oír su voz, y le introdujo en la calígine; cara a cara le dio los mandamientos, la ley de vida y de saber, para enseñar a Jacob su alianza, y sus decretos a Israel. (Eclesiástico 45, 5)

  • Le dio, por sus mandamientos, potestad sobre las prescripciones legales, para enseñar a Jacob sus dictámenes e ilustrar a Israel en su ley. (Eclesiástico 45, 17)

  • Y sucedió que, cuando acabó Jesús de dar instrucciones a sus doce discípulos, partió de allí para enseñar y predicar en sus ciudades. (Mateo 11, 1)

  • En aquel momento dijo Jesús a la gente: «¿Como contra un salteador habéis salido a prenderme con espadas y palos? Todos los días me sentaba en el Templo para enseñar, y no me detuvisteis. (Mateo 26, 55)


“A sua função é tirar e transportar as pedras, e arrancar os espinhos. Jesus é quem semeia, planta, cultiva e rega. Mas seu trabalho também é obra de Jesus. Sem Ele você nada pode fazer.” São Padre Pio de Pietrelcina