Gefunden 222 Ergebnisse für: Ancianos

  • Razías, uno de los ancianos de Jerusalén, fue denunciado a Nicanor. Era hombre amante de sus conciudadanos, muy bien considerado, llamado por su buen corazón «Padre de los judíos», (II Macabeos 14, 37)

  • Corona de los ancianos son los hijos de los hijos; los padres son el honor de los hijos. (Proverbios 17, 6)

  • Nun. Su marido es considerado en las puertas, cuando se sienta con los ancianos del país. (Proverbios 31, 23)

  • «Tendré gracias a ella gloria entre la gente, y, aunque joven, honor ante los ancianos. (Sabiduría 8, 10)

  • Acude a la reunión de los ancianos; ¿que hay un sabio?, júntate a él. (Eclesiástico 6, 34)

  • No seas hablador en la reunión de los ancianos, en tu plegaria no repitas palabras. (Eclesiástico 7, 14)

  • ¡Qué bien sienta el juicio a las canas, a los ancianos el tener consejo! (Eclesiástico 25, 4)

  • Yahveh demanda en juicio a los ancianos de su pueblo y a sus jefes. «Vosotros habéis incendiado la viña, el despojo del mísero tenéis en vuestras casas. (Isaías 3, 14)

  • Se afrentará la luna llena, se avergonzará el pleno sol, cuando reine Yahveh Sebaot en el monte Sión y en Jerusalén, y esté la Gloria en presencia de sus ancianos. (Isaías 24, 23)

  • Envió a Elyaquim, mayordomo, a Sebná, secretario, y a los sacerdotes ancianos cubiertos de sayal donde el profeta Isaías, hijo de Amós. (Isaías 37, 2)

  • Entonces Yahveh dijo a Jeremías: Ve y compras un jarro de cerámica; tomas contigo a algunos ancianos del pueblo y algunos sacerdotes, (Jeremías 19, 1)

  • Este es el tenor de la carta que envió el profeta Jeremías desde Jeursalén al resto de los ancianos de la deportación, a los sacerdotes, profetas y pueblo en general, que había deportado Nabucodonosor desde Jerusalén a Babilonia (Jeremías 29, 1)


“O Senhor sempre orienta e chama; mas não se quer segui-lo e responder-lhe, pois só se vê os próprios interesses. Às vezes, pelo fato de se ouvir sempre a Sua voz, ninguém mais se apercebe dela; mas o Senhor ilumina e chama. São os homens que se colocam na posição de não conseguir mais escutar.” São Padre Pio de Pietrelcina