Gefunden 583 Ergebnisse für: palabras sabias

  • De todas las maneras posibles, les he mostrado que así, trabajando duramente, se debe ayudar a los débiles, y que es preciso recordar las palabras del Señor Jesús: "La felicidad está más en dar que en recibir"». (Hechos 20, 35)

  • Al oír estas palabras, los hermanos del lugar y nosotros mismos rogamos a Pablo que no subiera a Jerusalén. (Hechos 21, 12)

  • Hasta aquí los judíos lo escucharon, pero al oír estas palabras comenzaron a gritar diciendo: «¡Elimina a este hombre. No merece vivir!». (Hechos 22, 22)

  • Al oír estas palabras, el centurión fue a informar al tribuno: «¿Qué vas a hacer?, le dijo. Este hombre es ciudadano romano». (Hechos 22, 26)

  • Apenas pronunció estas palabras, surgió una disputa entre fariseos y saduceos, y la asamblea se dividió. (Hechos 23, 7)

  • Pero el centurión confiaba más en el capitán y en el patrón del barco que en las palabras de Pablo; (Hechos 27, 11)

  • Unos se convencían con sus palabras, pero otros se resistían a creer, (Hechos 28, 24)

  • y mientras ellos se retiraban sin haberse puesto de acuerdo, Pablo dijo esta sola frase: «Son muy ciertas las palabras que el Espíritu Santo dijo a los padres de ustedes, por medio del profeta Isaías: (Hechos 28, 25)

  • Yo me pregunto: ¿Acaso no la han oído? Sí, por supuesto: Por toda la tierra se extiende su voz y sus palabras llegan hasta los confines del mundo. (Romanos 10, 18)

  • porque ellos no sirven a nuestro Señor Jesucristo, sino a su propio interés, seduciendo a los simples con palabras suaves y aduladoras. (Romanos 16, 18)

  • Nosotros no hablamos de estas cosas con palabras aprendidas de la sabiduría humana, sino con el lenguaje que el Espíritu de Dios nos ha enseñado, expresando en términos espirituales las realidades del Espíritu. (I Corintios 2, 13)

  • Pero pronto iré a verlos -si así lo quiere el Señor- y entonces los juzgaré, no por sus palabras, sino por el poder que tienen. (I Corintios 4, 19)


“Quem te agita e te atormenta é o demônio.Quem te consola é Deus”! São Padre Pio de Pietrelcina