Gefunden 97 Ergebnisse für: llegue

  • También al extranjero, que no pertenezca a tu pueblo Israel, y llegue de un país lejano a causa de tu Nombre (I Reyes 8, 41)

  • Eliseo estaba sentado en su casa, y los ancianos estaban sentados con él. El rey le envió a uno de sus hombres; pero antes que llegara el mensajero, Eliseo dijo a los ancianos: "¿Han visto que este hijo de asesino envía a un hombre a cortarme la cabeza? Estén atentos, y cuando llegue el mensajero, empújenlo con la puerta y atránquenla bien. ¿Acaso no se oyen los pasos de su señor que viene detrás de él?". (II Reyes 6, 32)

  • Por medio de tus mensajeros has insultado al Señor, y has dicho: ‘Con mis numerosos carros escalé la cima de las montañas, los rincones inaccesibles del Líbano. Talé sus cedros más altos, sus mejores cipreses; llegué hasta su último extremo, hasta lo más espeso de su bosque. (II Reyes 19, 23)

  • También al extranjero, que no pertenece a tu pueblo Israel, y llegue de un país lejano a causa de tu gran Nombre, de tu mano poderosa y de tu brazo extendido, si él viene a orar hacia esta Casa, (II Crónicas 6, 32)

  • Después que me deportaron a Asiria y fui llevado cautivo, llegué a Nínive. Todos mis hermanos y mis compatriotas comían de los manjares de los paganos. (Tobías 1, 10)

  • el Altísimo me concedió el favor de Salmanasar, y llegué a ser el encargado de sus compras. (Tobías 1, 13)

  • Adelantémonos para preparar la casa, antes que llegue tu esposa con los demás". (Tobías 11, 3)

  • Estarás protegido contra el azote de las malas lenguas y no temerás cuando llegue la devastación. (Job 5, 21)

  • Aunque lo llamara y él me respondiera, no creo que llegue a escucharme. (Job 9, 16)

  • - Un hombre, una vez muerto, ¿podrá revivir?-. Entonces yo esperaría, todos los días de mi servicio, hasta que llegue mi relevo: (Job 14, 14)

  • Aunque su altura se eleve hasta el cielo y llegue a tocar las nubes con la cabeza, (Job 20, 6)

  • Si el río se enfurece, no se perturba; está sereno, aunque un Jordán le llegue a la garganta. (Job 40, 23)


“O Santo Sacrifício da Missa é o sufrágio mais eficaz, que ultrapassa todas as orações, as boas obras e as penitências. Infalivelmente produz seu efeito para vantagem das almas por sua virtude própria e imediata.” São Padre Pio de Pietrelcina