Gefunden 248 Ergebnisse für: jefe

  • Cuando Elías fue llevado en un torbellino, Eliseo quedó lleno de su espíritu. Durante su vida ningún jefe lo hizo temblar, y nadie pudo someterlo. (Eclesiástico 48, 12)

  • No quedó nada más que un pueblo muy pequeño, con un jefe de la casa de David. Algunos de ellos hicieron lo que agrada a Dios, pero otros multiplicaron sus pecados. (Eclesiástico 48, 16)

  • Tampoco nació ningún hombre como José, jefe de sus hermanos, sostén de su pueblo; sus huesos fueron tratados con respeto. (Eclesiástico 49, 15)

  • el jefe de batallón, el dignatario y el consejero, el experto en artes mágicas y el hábil encantador. (Isaías 3, 3)

  • Entonces un hombre agarrará a su hermano en la casa de su padre, y le dirá: "Tú tienes un manto, sé nuestro jefe; que este montón de ruinas esté bajo tu mando". (Isaías 3, 6)

  • Pero el otro replicará en aquel día: "Yo no sirvo para curar, y no hay en mi casa ni pan ni manto; ¡no harán de mí un jefe del pueblo!". (Isaías 3, 7)

  • El año en que el general en jefe enviado por Sargón, rey de Asiria, llegó a Asdod, la atacó y la tomó, (Isaías 20, 1)

  • Yo lo he puesto como testigo para los pueblos, jefe y soberano de naciones. (Isaías 55, 4)

  • Su jefe será uno de ellos y de en medio de ellos saldrá su soberano. Yo lo haré acercarse, y él avanzará hacia mí, porque si no, ¿quién se atrevería a avanzar hacia mí? -oráculo del Señor-. (Jeremías 30, 21)

  • Entonces entraron todos los jefes del rey de Babilonia, y se instalaron en la puerta del Medio: Nergalsaréser, Samgarnebó, Sarsequím, jefe de los eunucos, Nergalsaréser, gran mago, y todos los otros jefes del rey de Babilonia. (Jeremías 39, 3)

  • Nebuzaradán, comandante de la guardia, Nebusazbán, jefe de los eunucos, Nergalsaréser, jefe de los magos, y todos los altos oficiales del rey de Babilonia, (Jeremías 39, 13)

  • En la ciudad apresó también a un eunuco, que estaba al frente de los hombres de guerra, a siete hombres del servicio personal del rey que fueron sorprendidos en la ciudad, al secretario del jefe del ejército, encargado de enrolar al pueblo del país, y a sesenta hombres del pueblo que estaban en medio de la ciudad. (Jeremías 52, 25)


“Onde não há obediência, não há virtude. Onde não há virtude, não há bem, não há amor; e onde não há amor, não há Deus; e sem Deus não se chega ao Paraíso. Tudo isso é como uma escada: se faltar um degrau, caímos”. São Padre Pio de Pietrelcina