Gefunden 381 Ergebnisse für: columnas del templo

  • Jesús llegó a Jerusalén y fue al Templo; y después de observarlo todo, como ya era tarde, salió con los Doce hacia Betania. (Marcos 11, 11)

  • Cuando llegaron a Jerusalén, Jesús entró en el Templo y comenzó a echar a los que vendían y compraban en él. Derribó las mesas de los cambistas y los puestos de los vendedores de palomas, (Marcos 11, 15)

  • y prohibió que transportaran cargas por el Templo. (Marcos 11, 16)

  • Y llegaron de nuevo a Jerusalén. Mientras Jesús caminaba por el Templo, los sumos sacerdotes, los escribas y los ancianos se acercaron a él (Marcos 11, 27)

  • Jesús se puso a enseñar en el Templo y preguntaba: «¿Cómo pueden decir los escribas que el Mesías es hijo de David? (Marcos 12, 35)

  • Jesús se sentó frente a la sala del tesoro del Templo y miraba cómo la gente depositaba su limosna. Muchos ricos daban en abundancia. (Marcos 12, 41)

  • Cuando Jesús salía del Templo, uno de sus discípulos le dijo: «¡Maestro, mira qué piedras enormes y qué construcción!». (Marcos 13, 1)

  • Y después, estando sentado en el monte de los Olivos, frente al Templo, Pedro, Santiago, Juan y Andrés le preguntaron en privado: (Marcos 13, 3)

  • Todos los días estaba entre ustedes enseñando en el Templo y no me arrestaron. Pero esto sucede para que se cumplan las Escrituras». (Marcos 14, 49)

  • «Nosotros lo hemos oído decir: "Yo destruiré este Templo hecho por la mano del hombre, y en tres días volveré a construir otro que no será hecho por la mano del hombre"». (Marcos 14, 58)

  • Los que pasaban lo insultaban, movían la cabeza y decían: «¡Eh, tú, que destruyes el Templo y en tres días lo vuelves a edificar, (Marcos 15, 29)

  • El velo del Templo se rasgó en dos, de arriba abajo. (Marcos 15, 38)


“A divina bondade não só não rejeita as almas arrependidas, como também vai em busca das almas teimosas”. São Padre Pio de Pietrelcina