Gefunden 81 Ergebnisse für: Árboles

  • regocíjese el campo con todos sus frutos, griten de gozo los árboles del bosque. (Salmos 96, 12)

  • Se llenan de savia los árboles del Señor, los cedros del Líbano que él plantó; (Salmos 104, 16)

  • abatió sus higueras y viñedos, y destrozó los árboles en sus campos; (Salmos 105, 33)

  • Las montañas y todas las colinas, los árboles frutales y todos los cedros; (Salmos 148, 9)

  • Renuncio también, a partir de hoy y para siempre, a percibir el tercio de los granos y la mitad de los frutos de los árboles que me corresponden, tanto de Judá como de los tres distritos anexos de Samaría y Galilea. (I Macabeos 10, 30)

  • Les confirmamos los límites territoriales de Judea, con los tres distritos de Aferema, Lida y Ramataim. Estos, con todas sus adyacencias, fueron separados de Samaría y anexados a Judea, para beneficio de los que ofrecen sacrificios en Jerusalén, en compensación por los impuestos reales que el rey percibía de ellos cada año, sobre los productos de la tierra y los frutos de los árboles. (I Macabeos 11, 34)

  • Se cultivaba la tierra en paz, el suelo producía sus cosechas y los árboles de la llanura sus frutos. (I Macabeos 14, 8)

  • me hice jardines y parques, y planté allí toda clase de árboles frutales; (Eclesiastés 2, 5)

  • me fabriqué cisternas, para regar el bosque donde crecían los árboles; (Eclesiastés 2, 6)

  • La Amada: Como un manzano entre los árboles silvestres, es mi amado entre los jóvenes: yo me senté a su sombra tan deseada y su fruto es dulce a mi paladar. (Cantar 2, 3)

  • nardo y azafrán, caña aromática y canela, con todos los árboles de incienso, mirra y áloe, con los mejores perfumes. (Cantar 4, 14)

  • Cuando se informó a la casa de David: "Arám está acampado en Efraím", se estremeció su corazón y el corazón de su pueblo, como se estremecen por el viento los árboles del bosque. (Isaías 7, 2)


“Não se desencoraje se você precisa trabalhar muito para colher pouco. Se você pensasse em quanto uma só alma custou a Jesus, você nunca reclamaria!” São Padre Pio de Pietrelcina