Gefunden 266 Ergebnisse für: piedra de ayuda

  • El es la piedra que ustedes los constructores despreciaron, y que se ha convertido en piedra angular. (Hecho de los Apóstoles 4, 11)

  • Entonces cada uno de los discípulos empezó a ahorrar según sus posibilidades, destinando esta ayuda a los hermanos de Judea. (Hecho de los Apóstoles 11, 29)

  • Si de verdad somos del linaje de Dios, no debemos pensar que la divinidad se parezca a las creaciones del arte y de la fantasía humanas, ya sean de oro, plata o piedra. (Hecho de los Apóstoles 17, 29)

  • Después de muchos años he vuelto a traer ayuda a los de mi nación y a ofrecer sacrificios. (Hecho de los Apóstoles 24, 17)

  • Pero, con la ayuda de Dios, seguí dando mi testimonio a grandes y pequeños hasta el día de hoy. En ningún momento me aparto de lo que Moisés y los Profetas dijeron de antemano: (Hecho de los Apóstoles 26, 22)

  • Somos débiles pero el Espíritu viene en nuestra ayuda. No sabemos cómo pedir ni qué pedir, pero el Espíritu lo pide por nosotros, sin palabras, como con gemidos. (Carta a los Romanos 8, 26)

  • Porque se ataba a las observancias y no a la fe. Y tropezaron con Aquel que es la piedra de tropiezo, (Carta a los Romanos 9, 32)

  • como está escrito: Mira que pongo en Sión una piedra para tropezar, una roca que hace caer, pero el que crea en él no será confundido. (Carta a los Romanos 9, 33)

  • Y David dice: Que sus banquetes sean trampa y un lazo, una piedra donde caigan ellos mismos y encuentren ahí su castigo. (Carta a los Romanos 11, 9)

  • para que pueda escapar de los enemigos de la fe en Judea y para que la comunidad reciba con agrado la ayuda que le llevo. (Carta a los Romanos 15, 31)

  • Tu acción de gracias habrá sido maravillosa, pero a él no le ayuda en nada. (1º Carta a los Corintios 14, 17)

  • Nadie puede negar que ustedes son una carta de Cristo, de la que hemos sido instrumentos, escrita no con tinta, sino con el Espíritu del Dios vivo; carta no grabada en tablas de piedra, sino en corazones humanos. (2º Carta a los Corintios 3, 3)


“Para que se preocupar com o caminho pelo qual Jesus quer que você chegue à pátria celeste – pelo deserto ou pelo campo – quando tanto por um como por outro se chegará da mesma forma à beatitude eterna?” São Padre Pio de Pietrelcina