Gefunden 52 Ergebnisse für: Belén

  • Al punto estos tres irrumpieron en medio del campamento de los filisteos, sacaron agua de la cisterna que hay en la puerta de Belén, se la llevaron y se la ofrecieron a David. Pero David no quiso beberla, sino que la derramó en el suelo y la ofreció a Yavé, diciendo: (1 Crónicas 11, 18)

  • Los héroes valientes fueron: Azael, hermano de Joab; Elkanan, hijo de Dodó, natural de Belén; (1 Crónicas 11, 26)

  • Fortificó Belén, Etam, Tecoa, (2 Crónicas 11, 6)

  • hombres de Belén, 123; (Esdras 2, 21)

  • los hombres de Belén y de Netofá, 188; (Nehemías 7, 26)

  • Se pusieron en camino e hicieron un alto en Caman, cerca de Belén. Su proyecto era irse a Egipto, lejos de los caldeos, a quienes temían, después que Ismael había asesinado a Godolías, puesto por el rey de Babilonia para gobernar el país. (Jeremías 41, 17)

  • Pero tú, Belén Efrata, aunque eres la más pequeña entre todos los pueblos de Judá, tú me darás a aquel que debe gobernar a Israel: su origen se pierde en el pasado, en épocas antiguas. (Miqueas 5, 1)

  • Jesús había nacido en Belén de Judá durante el reinado de Herodes. Unos Magos que venían de Oriente llegaron a Jerusalén (Evangelio según San Mateo 2, 1)

  • Ellos le contestaron: «En Belén de Judá, pues así lo escribió el profeta: (Evangelio según San Mateo 2, 5)

  • Y tú, Belén, tierra de Judá, no eres en absoluto la más pequeña entre los pueblos de Judá, porque de ti saldrá un jefe, el que apacentará a mi pueblo, Israel. (Evangelio según San Mateo 2, 6)

  • Después los envió a Belén y les dijo: «Vayan y averigüen bien todo lo que se refiere a ese niño, y apenas lo encuentren, avísenme, porque yo también iré a rendirle homenaje.» (Evangelio según San Mateo 2, 8)

  • Herodes se enojó muchísimo cuando se dio cuenta que los Magos lo habían engañado, y fijándose en la fecha que ellos le habían dicho, ordenó matar a todos los niños menores de dos años que había en Belén y sus alrededores. (Evangelio según San Mateo 2, 16)


“É loucura fixar o olhar no que rapidamente passa”. São Padre Pio de Pietrelcina