Isaías, 15
4. Jesebón y Elealé gritan, hasta Jahas se oye su voz. Por eso se conmueven los valientes de Moab y tiembla su alma.
4. Jesebón y Elealé gritan, hasta Jahas se oye su voz. Por eso se conmueven los valientes de Moab y tiembla su alma.
“Não se desencoraje, pois, se na alma existe o contínuo esforço de melhorar, no final o Senhor a premia fazendo nela florir, de repente, todas as virtudes como num jardim florido.” São Padre Pio de Pietrelcina