13. Quedaron admirados al ver la seguridad con que hablaban Pedro y Juan, que eran hombres sin instrucción ni preparación, pero sabían que habían estado con Jesús.





“As almas não são oferecidas como dom; compram-se. Vós ignorais quanto custaram a Jesus. É sempre com a mesma moeda que é preciso pagá-las”. São Padre Pio de Pietrelcina