Encontrados 28 resultados para: vientos

  • Entonces él me dijo: "Profetiza al espíritu, profetiza, hijo de hombre, y di al espíritu: Esto dice el Señor Dios: ¡Ven, espíritu, de los cuatro vientos y sopla sobre estos muertos para que revivan!". (Ezequiel 37, 9)

  • Vientos todos, bendecid al Señor, alabadlo y ensalzadlo eternamente. (Daniel 3, 65)

  • Daniel tomó la palabra y dijo: "Veía yo en visiones durante la noche que los cuatro vientos del cielo agitaban el mar grande; (Daniel 7, 2)

  • Luego el macho cabrío se hizo extraordinariamente poderoso; pero cuando estaba en la cúspide de su poder, su gran cuerno se partió y, en su lugar, despuntaron otros cuatro bien visibles, hacia los cuatro vientos del cielo. (Daniel 8, 8)

  • Una vez afirmado su imperio será destrozado y dividido a los cuatro vientos del cielo. No pasará a sus hijos, ni tendrá el mismo poder; su reino será exterminado y pasará a otros, excluidos sus descendientes. (Daniel 11, 4)

  • El ángel me respondió: Son los cuatro vientos del cielo, que salen de la presencia del Señor de toda la tierra. (Zacarías 6, 5)

  • Cayó la lluvia, se desbordaron los ríos, soplaron los vientos y se echaron sobre ella; pero la casa no se cayó, porque estaba cimentada sobre la roca. (Mateo 7, 25)

  • Cayó la lluvia, se desbordaron los ríos, soplaron los vientos y se precipitaron sobre ella, y la casa se cayó y se arruinó totalmente". (Mateo 7, 27)

  • Jesús les dijo: "¿Por qué tembláis, hombres de poca fe?". Entonces se levantó, increpó a los vientos y al mar y sobrevino una gran calma. (Mateo 8, 26)

  • Y mandará a sus ángeles con potentes trompetas, y reunirán de los cuatro vientos a los elegidos desde uno a otro extremo del mundo". (Mateo 24, 31)

  • Mandará a sus ángeles a reunir a sus elegidos de los cuatro vientos, desde uno a otro extremo del cielo y de la tierra". (Marcos 13, 27)

  • Entonces les dijo: "¿Dónde está vuestra fe?". Llenos de miedo y de admiración, se decían: "¿Quién es éste, que manda incluso a los vientos y al agua y le obedecen?". (Lucas 8, 25)


“Mesmo quando perdemos a consciência deste mundo, quando parecemos já mortos, Deus nos dá ainda uma chance de entender o que é realmente o pecado, antes de nos julgar. E se entendemos corretamente, como podemos não nos arrepender?” São Padre Pio de Pietrelcina