Encontrados 386 resultados para: tribu de benjamín

  • Jacob les dijo: "Me vais a dejar sin hijos. José desapareció, Simeón también, ¿y queréis llevarme a Benjamín? ¡Todo está contra mí!". (Génesis 42, 36)

  • Que el Dios todopoderoso haga que aquel hombre sea benévolo con vosotros y os deje traer libre al otro hermano vuestro y a Benjamín. En cuanto a mí, si he de verme privado de mis hijos, que así sea". (Génesis 43, 14)

  • Tomaron los regalos, doble cantidad de dinero y a Benjamín, y se pusieron en camino. Llegaron a Egipto y se presentaron a José. (Génesis 43, 15)

  • Cuando José vio a Benjamín con ellos, dijo a su mayordomo: "Lleva a estos hombres a casa, mata un animal y aderézalo, porque comerán conmigo al mediodía". (Génesis 43, 16)

  • José alzó los ojos y vio a Benjamín, su hermano materno, y preguntó: "¿Es éste vuestro hermano menor, del que me hablasteis?". Y a él le dijo: "Dios te guarde, hijo mío". (Génesis 43, 29)

  • Él les mandaba desde su mesa las porciones, y la porción de Benjamín era cinco veces mayor que la de todos los otros. Así bebieron y se alegraron en su compañía. (Génesis 43, 34)

  • Él los registró empezando por el mayor y terminando por el menor, y la copa fue encontrada en el saco de Benjamín. (Génesis 44, 12)

  • Vosotros y mi hermano Benjamín veis con vuestros propios ojos que es mi boca la que os habla. (Génesis 45, 12)

  • Se abrazó al cuello de Benjamín y se echó a llorar, y Benjamín también lloró abrazado a él. (Génesis 45, 14)

  • Dio un traje nuevo a cada uno, pero a Benjamín le dio trescientas monedas de plata y cinco trajes nuevos. (Génesis 45, 22)

  • Hijos de Raquel, la mujer de Jacob: José y Benjamín. (Génesis 46, 19)

  • Hijos de Benjamín: Bela, Béker, Asbel. Hijos de Bela: Guerá, Naamán, Ejí, Ros, Mupín, Yupín y Ared. (Génesis 46, 21)


“Que Maria sempre enfeite sua alma com as flores e o perfume de novas virtudes e coloque a mão materna sobre sua cabeça. Fique sempre e cada vez mais perto de nossa Mãe celeste, pois ela é o mar que deve ser atravessado para se atingir as praias do esplendor eterno no reino do amanhecer.” São Padre Pio de Pietrelcina