Encontrados 115 resultados para: trabajo

  • Se comprobado que lo mejor y más conveniente para el hombre es comer y beber y gozar del bienestar en todo el trabajo en que se afana bajo el sol durante los días de su vida que Dios le ha dado, porque ésta es su parte. (Eclesiastés 5, 17)

  • Igualmente, cuando Dios da a un hombre riquezas y hacienda y le permite disfrutar de ellas, tomarse su parte y gozar de su trabajo, eso es un don de Dios. (Eclesiastés 5, 18)

  • Todo el trabajo del hombre es para su boca; y, con todo, sus deseos nunca se sacian. (Eclesiastés 6, 7)

  • Así pues, alabo la alegría, porque para el hombre no hay bajo el sol otra felicidad que comer y beber y gozar. Y esto le acompaña en su trabajo en los días de su vida que le da Dios bajo el sol. (Eclesiastés 8, 15)

  • Goza de la vida con la mujer que amas, todos los días de tu vida de vanidad que Dios te da bajo el sol, porque ésa es tu parte en la vida y en el trabajo con que te afanas bajo el sol. (Eclesiastés 9, 9)

  • El trabajo del tonto fatiga, porque ni siquiera sabe ir a la ciudad. (Eclesiastés 10, 15)

  • Desgraciado el que desprecia la sabiduría y la disciplina; vana es su esperanza, infructuoso su trabajo e inútiles sus obras. (Sabiduría 3, 11)

  • Porque glorioso es el fruto del trabajo honrado, y la raíz de la sabiduría es imperecedera. (Sabiduría 3, 15)

  • Si uno ama la justicia, las virtudes son el fruto de su trabajo, porque enseña templanza y prudencia, justicia y fortaleza, y nada hay más útil para los hombres en la vida. (Sabiduría 8, 7)

  • Pues si a duras penas conjeturamos lo que ocurre en la tierra, y con trabajo descubrimos lo que tenemos entre las manos ¿quién rastreará lo que hay en los cielos? (Sabiduría 9, 16)

  • Porque ni la humana invención de un arte perverso nos engañó, ni el trabajo estéril de los pintores, figuras adornadas de variados colores, (Sabiduría 15, 4)

  • Después, dedicándose a un trabajo reprobable, del mismo barro modela un dios falso él, que hace bien poco nació de la tierra y volverá bien pronto a ella, de donde fue sacado, cuando le pidan que restituya su vida prestada. (Sabiduría 15, 8)


“O Senhor se comunica conosco à medida que nos libertamos do nosso apego aos sentidos, que sacrificamos nossa vontade própria e que edificamos nossa vida na humildade.” São Padre Pio de Pietrelcina