Encontrados 117 resultados para: tenga

  • que se levantará contra todo lo divino y todo lo que tenga carácter religioso, hasta llegar a sentarse en el santuario de Dios, haciéndose pasar a sí mismo por Dios. (II Tesalonicenses 2, 4)

  • Es también necesario que tenga buena fama ante los de fuera, para que no incurra en el descrédito y en los lazos del diablo. (I Timoteo 3, 7)

  • Que el Señor tenga misericordia de la familia de Onesíforo, porque muchas veces me ha reconfortado y no se avergonzó de mis cadenas, (II Timoteo 1, 16)

  • Que el Señor tenga misericordia de él en el último día. Tú sabes mejor que nadie los servicios que prestó en Éfeso. (II Timoteo 1, 18)

  • En mi primera defensa nadie me ayudó; todos me abandonaron. ¡Que Dios no se lo tenga en cuenta! (II Timoteo 4, 16)

  • que el candidato sea irreprochable; casado una sola vez; que tenga hijos creyentes, a los que no se les pueda inculpar de libertinaje o indisciplina. (Tito 1, 6)

  • En efecto, todo sumo sacerdote es instituido para ofrecer dones y sacrificios; por lo cual es necesario que éste tenga también algo que ofrecer. (Hebreos 8, 3)

  • para que la pureza de vuestra fe mucho más preciosa que el oro que aunque acrisolado por el fuego se corrompe aparezca digna de alabanza de gloria y de honor cuando tenga lugar la manifestación de Jesucristo, (I Pedro 1, 7)

  • el que tenga el don de la palabra, que use de él como el que comunica palabras de Dios; el que presta un servicio que lo haga como mandatario de Dios de manera que en todo sea Dios glorificado por Jesucristo al cual se debe la gloria y el poder por los siglos de los siglos. Amén. (I Pedro 4, 11)

  • Que ninguno de vosotros tenga que sufrir por ser homicida, ladrón, malhechor o por mezclarse en asuntos ajenos (I Pedro 4, 15)

  • El que tenga oídos que oiga lo que el Espíritu dice a las Iglesias. Al vencedor le daré a comer del árbol de la vida, que está en el paraíso de Dios. (Apocalipsis 2, 7)

  • El que tenga oídos que oiga lo que el Espíritu dice a las Iglesias. El vencedor no será víctima de la segunda muerte. (Apocalipsis 2, 11)


“Reze, reze! Quem muito reza se salva e salva os outros. E qual oração pode ser mais bela e mais aceita a Nossa Senhora do que o Rosario?” São Padre Pio de Pietrelcina