Encontrados 111 resultados para: tener

  • Pero no le preocupa que haya de morir ni tener una corta vida, sino que rivaliza con orfebres y plateros, imita a los forjadores de bronce y se gloría de ser un falsificador. (Sabiduría 15, 9)

  • El principio de la soberbia es apartarse del Señor y tener alejado el corazón de su hacedor. (Eclesiástico 10, 12)

  • No censures antes de tener pruebas; investiga primero, y después corrige. (Eclesiástico 11, 7)

  • No desees multitud de hijos si son unos inútiles, ni te alegres de tener hijos malvados. (Eclesiástico 16, 1)

  • No hables demasiado con el necio ni vayas con el insensato; guárdate de él para no tener disgustos y no mancharte con su contacto. Apártate de él y vivirás tranquilo, y no tendrás que sufrir por su necedad. (Eclesiástico 22, 13)

  • Gana la confianza del prójimo en su pobreza, para que en su prosperidad puedas tener alegría. En los días de tribulación permanece a su lado, para que en su herencia tengas tu parte. (Eclesiástico 22, 23)

  • Penoso es tener que andar de casa en casa; donde habites no abras la boca. (Eclesiástico 29, 24)

  • de tener familiaridades con criada de aquélla, y de acercarte a su lecho; (Eclesiástico 41, 24)

  • Entonces él descendía y levantaba las manos sobre la congregación del pueblo de Israel para dar en voz alta la bendición del Señor y tener el honor de pronunciar su nombre. (Eclesiástico 50, 20)

  • ¿Puede acaso una mujer olvidarse del niño que cría, no tener compasión del hijo de sus entrañas? Pues aunque ella lo olvidara, yo no me olvidaría de ti. (Isaías 49, 15)

  • Tus iniquidades te castigan, tus infidelidades te condenan. Date cuenta, comprende qué funesto es y qué amargo abandonar al Señor tu Dios, no tener ya temor de mí, dice el Señor Dios todopoderoso. (Jeremías 2, 19)

  • Sí, un lamento llega de Sión: ¡Ah, en qué desastre estamos! ¡Qué vergüenza nos cubre! ¡Tener que abandonar la patria y dejar nuestra casa! (Jeremías 9, 18)


“O demônio é forte com quem o teme, mas é fraco com quem o despreza.” São Padre Pio de Pietrelcina