Encontrados 126 resultados para: perdido y encontrado

  • Al séptimo día lo volverá a examinar; si ve que la llaga ha perdido brillo y no se ha extendido por la piel, el sacerdote lo declarará puro: se trata de una pústula. Lavará sus vestidos y quedará puro. (Levítico 13, 6)

  • Pero si la mancha sigue en el mismo sitio sin extenderse y ha perdido su color, es simplemente la inflamación de la quemadura. El sacerdote lo declarará puro, porque se trata de la cicatriz de la quemadura". (Levítico 13, 28)

  • Pero si el sacerdote ve que la mancha ha perdido color, después de lavarla, arrancará del vestido la parte manchada. (Levítico 13, 56)

  • El que no tuviere rescatador, podrá él mismo, cuando haya encontrado con qué hacer el rescate, (Levítico 25, 26)

  • ¡Ay de ti, Moab! ¡Estás perdido, pueblo de Camós! Ha abandonado sus hijos a la fuga, y sus hijas a la esclavitud, a manos de Sijón, rey de los amorreos. (Números 21, 29)

  • Traemos, pues, como ofrenda al Señor los objetos de oro, brazaletes, cadenas, anillos, pendientes y collares que cada uno ha encontrado, para hacer el rito de absolución sobre nosotros delante del Señor". (Números 31, 50)

  • Lo mismo harás con su asno, con su manto y con todo objeto perdido por tu hermano que tú encuentres. No debes desentenderte de ellos. (Deuteronomio 22, 3)

  • tanto que le hace acusaciones deshonrosas, diciendo: No he encontrado virgen a tu hija. Pero ahí están las pruebas de la virginidad. Y extenderá la sábana ante los ancianos de la ciudad. (Deuteronomio 22, 17)

  • Pero si la acusación es verdadera y no se han encontrado en la joven las pruebas de la virginidad, (Deuteronomio 22, 20)

  • Si un hombre se casa con una mujer y luego no le gusta por haber encontrado en ella algo indecente, le dará por escrito un certificado de divorcio y la echará de casa. (Deuteronomio 24, 1)

  • Es una nación que ha perdido la cabeza y no tiene entendimiento. (Deuteronomio 32, 28)

  • Seguramente han encontrado botín y lo están repartiendo; una, dos jóvenes para cada guerrero, un vestido, dos vestidos de colores para Sísara; un vestido, dos vestidos bordados para su cuello. (Jueces 5, 30)


“Enquanto tiver medo de ser infiel a Deus, você não será’. Deve-se ter medo quando o medo acaba!” São Padre Pio de Pietrelcina