Encontrados 458 resultados para: nadie

  • Tú me podrás decir: Entonces, ¿por qué culpa a nadie? Porque nadie puede resistir a su voluntad. (Romanos 9, 19)

  • Ahora bien, ¿cómo van a invocar a aquel en quien no creen? ¿Cómo van a creer en él si no han oído hablar de él? ¿Y cómo van a oír hablar de él si nadie les predica? (Romanos 10, 14)

  • No devolváis a nadie mal por mal. Procurad hacer el bien ante todos los hombres. (Romanos 12, 17)

  • No debáis nada a nadie; amaos unos a otros, pues el que ama al prójimo ha cumplido la ley. (Romanos 13, 8)

  • Él os mantendrá firmes hasta el fin, para que nadie os pueda reprochar nada el día de la venida de nuestro Señor Jesucristo. (I Corintios 1, 8)

  • Así nadie puede decir que fuisteis bautizados en mi nombre. (I Corintios 1, 15)

  • También bauticé a la familia de Esteban; no recuerdo haber bautizado a nadie más. (I Corintios 1, 16)

  • para que nadie presuma delante de Dios. (I Corintios 1, 29)

  • ¿Qué hombre, en efecto, conoce lo íntimo del hombre, sino el espíritu del hombre que está en él? De la misma manera, nadie conoce las cosas de Dios, sino el Espíritu de Dios. (I Corintios 2, 11)

  • El espiritual, por el contrario, lo juzga todo, y a él nadie le juzga. (I Corintios 2, 15)

  • Porque nadie puede poner otro fundamento que el que está ya puesto, que es Jesucristo. (I Corintios 3, 11)

  • Nadie se engañe a sí mismo. Si alguno entre vosotros piensa que es sabio según la sabiduría de este mundo, que se haga necio para llegar a ser sabio. (I Corintios 3, 18)


“Pobres e desafortunadas as almas que se envolvem no turbilhão de preocupações deste mundo. Quanto mais amam o mundo, mais suas paixões crescem, mais queimam de desejos, mais se tornam incapazes de atingir seus objetivos. E vêm, então, as inquietações, as impaciências e terríveis sofrimentos profundos, pois seus corações não palpitam com a caridade e o amor. Rezemos por essas almas desafortunadas e miseráveis, para que Jesus, em Sua infinita misericórdia, possa perdoá-las e conduzi-las a Ele.” São Padre Pio de Pietrelcina