Encontrados 52 resultados para: llamas

  • Cuando el sol se reflejó en los escudos de oro y bronce, resplandecieron las montañas y brillaron como llamas de fuego. (I Macabeos 6, 39)

  • Pero ni Jonatán ni su ejército se apercibieron de su partida hasta el alba, pues veían las llamas. (I Macabeos 12, 29)

  • si llamas a la prudencia y levantas tu voz hacia la inteligencia; (Proverbios 2, 3)

  • Como un loco que lanza llamas, saetas y muerte, (Proverbios 26, 18)

  • Ella: Ponme como sello sobre tu corazón, como sello sobre tu brazo; porque es fuerte el amor como la muerte; inflexibles, como el infierno, son los celos. Flechas de fuego son sus flechas, llamas divinas son sus llamas. (Cantar 8, 6)

  • Las llamas, por el contrario, no consumían las carnes de endebles animales que en ellas se movían, ni se derretía aquel alimento celestial, semejante al rocío y tan frágil como él. (Sabiduría 19, 21)

  • No atices el fuego del pecador, para que no seas abrasado por sus llamas. (Eclesiástico 8, 10)

  • Antes que las llamas se ve el humo del horno, así a la sangre derramada preceden las injurias. (Eclesiástico 22, 24)

  • de la asfixia de las llamas que me rodeaban, de en medio del fuego que yo no había encendido; (Eclesiástico 51, 4)

  • Porque todo calzado de guerra estrepitoso, todo manto manchado de sangre será quemado, pasto de las llamas. (Isaías 9, 4)

  • La cólera del Señor omnipotente ha incendiado la tierra, y el pueblo se ha vuelto pasto de las llamas. Nadie perdona a su vecino. (Isaías 9, 18)

  • Se estremecen en Sión los pecadores, el terror invade a los criminales. ¿Quién de nosotros podrá resistir ante el fuego abrasador; quién resistirá estas llamas eternas? (Isaías 33, 14)


“Leve Deus aos doente; valera’ mais do que qualquer tratamento!” São Padre Pio de Pietrelcina