Encontrados 995 resultados para: fuego del cielo

  • Si queda para el día siguiente algo de carne del sacrificio de investidura o de los panes, lo quemas en el fuego; no se comerá, porque es cosa santa. (Exodo 29, 34)

  • Por la tarde, entre dos luces, ofrecerás el segundo cordero con la misma ofrenda y libación que a la mañana, en sacrificio de olor agradable, sacrificio de fuego en honor del Señor, (Exodo 29, 41)

  • Será entre mí y los israelitas una señal perpetua, porque en seis días hizo el Señor el cielo y la tierra, y el séptimo cesó y descansó". (Exodo 31, 17)

  • Acuérdate de Abrahán, de Isaac y de Jacob, tus siervos, a quienes juraste por ti mismo diciendo: Yo multiplicaré vuestra descendencia como las estrellas del cielo y toda esta tierra, de que os he hablado, se la daré a vuestra descendencia en posesión perpetua". (Exodo 32, 13)

  • Yo les he dicho: El que tenga oro, que se desprenda de él. Me lo han dado, lo eché en el fuego y ha salido este becerro". (Exodo 32, 24)

  • No encenderéis fuego en vuestras casas el día del sábado". (Exodo 35, 3)

  • La nube del Señor se posaba de día sobre el tabernáculo, y durante la noche brillaba como fuego a la vista de toda la casa de Israel en todas las etapas del viaje. (Exodo 40, 38)

  • y los hijos de Aarón, los sacerdotes, pondrán fuego sobre el altar, dispondrán leña sobre el fuego (Levítico 1, 7)

  • y acomodarán los trozos, con la cabeza y las grasas, encima de la leña colocada sobre el fuego del altar. (Levítico 1, 8)

  • Lo descuartizará, y el sacerdote dispondrá los trozos, con la cabeza y las grasas, sobre la leña colocada encima del fuego del altar. (Levítico 1, 12)

  • Partirá el animal en dos mitades, un ala por cada lado, sin separarlas totalmente, y el sacerdote lo quemará sobre la leña que arde encima del fuego que está sobre el altar: es un holocausto, una ofrenda quemada, un perfume agradable al Señor. (Levítico 1, 17)

  • Si haces al Señor una ofrenda de primicias, será de espigas tostadas al fuego o una pasta de granos triturados; (Levítico 2, 14)


“A maior caridade é aquela que arranca as pessoas vencidas pelo demônio, a fim de ganhá-las para Cristo. E isso eu faço assiduamente, noite e dia.” São Padre Pio de Pietrelcina