Encontrados 204 resultados para: familia de Aser

  • Éstas son las palabras de Jeremías, hijo de Jelcías, de la familia de sacerdotes que habitaban en Anatot, en el territorio de Benjamín. (Jeremías 1, 1)

  • Volved, hijos rebeldes -dice el Señor-, porque yo soy vuestro dueño; os tomaré, uno de cada ciudad y dos de cada familia, y os conduciré a Sión. (Jeremías 3, 14)

  • Pues hasta tus hermanos y tu familia te traicionan. Ellos mismos, a tus espaldas, te critican a voces. No te fíes de ellos cuando te dan buenas palabras. (Jeremías 12, 6)

  • Yo tomé a Yazanías, hijo de Jeremías, hijo de Habasinías, a sus hermanos, a todos sus hijos y a toda la familia de los recabitas (Jeremías 35, 3)

  • Jeremías dijo a Sedecías: "Esto dice el Señor todopoderoso, Dios de Israel: Si sales y te entregas a los generales del rey de Babilonia, salvarás tu vida, y esta ciudad no será entregada a las llamas: te salvarás juntamente con tu familia. (Jeremías 38, 17)

  • Limitando con Dan, desde la frontera oriental hasta la occidental: Aser, una parte. (Ezequiel 48, 2)

  • Limitando con Aser, desde la frontera oriental hasta la occidental: Neftalí, una parte. (Ezequiel 48, 3)

  • Por el lado oeste, dos mil doscientos cincuenta metros y tres puertas: la puerta de Gad, la puerta de Aser, la puerta de Neftalí. (Ezequiel 48, 34)

  • El rey ordenó después a Aspenaz, jefe de los eunucos, que escogiese de entre los israelitas algunos jóvenes de estirpe real y de familia noble: (Daniel 1, 3)

  • Escuchad esta palabra que el Señor dirige contra vosotros, israelitas, contra toda la familia que saqué de Egipto: (Amós 3, 1)

  • Quitaré de su boca la sangre, y de entre sus dientes las comidas prohibidas. Ellos serán también como un resto para nuestro Dios, y como una familia en Judá. Ecrón será como el jebuseo. (Zacarías 9, 7)

  • Se hará duelo en todo el país, familia por familia; la familia de la casa de David por sí, y sus mujeres aparte; la familia de la casa de Natán por sí, y sus mujeres aparte; (Zacarías 12, 12)


“Onde há mais sacrifício, há mais generosidade.” São Padre Pio de Pietrelcina