Encontrados 110 resultados para: extranjeros

  • No olvidaréis la alianza que hice con vosotros y no daréis culto a dioses extranjeros, (II Reyes 17, 38)

  • por haberme abandonado y haber quemado incienso a dioses extranjeros hasta provocar mi indignación con todas las obras de sus manos; mi cólera se encenderá contra este lugar y no se apagará. (II Reyes 22, 17)

  • Entonces, cuando no eran más que un puñado, poco numerosos, extranjeros en la tierra, (I Crónicas 16, 19)

  • David ordenó que se reunieran todos los extranjeros que había en Israel, y los empleó como canteros en labrar piedras para la construcción de la casa de Dios. (I Crónicas 22, 2)

  • Ante ti somos extranjeros y emigrantes, como lo fueron todos nuestros padres. Nuestros días sobre la tierra pasan como sombra en la cual no hay esperanza. (I Crónicas 29, 15)

  • Salomón hizo el censo de todos los extranjeros residentes en Israel, después del que había hecho su padre David, y salieron 153.600. (II Crónicas 2, 16)

  • Destruyó los altares de los dioses extranjeros, las colinas, las estelas y los cipos sagrados; (II Crónicas 14, 2)

  • Toda la asamblea de Judá, sacerdotes, levitas, todos los que habían venido de Israel, los extranjeros que habían venido de Israel, y los residentes en Judá, estaban rebosantes de alegría. (II Crónicas 30, 25)

  • Quitó del templo del Señor los dioses extranjeros, el ídolo y todos los altares que él mismo había levantado sobre el monte del templo y en Jerusalén, y los tiró fuera de la ciudad. (II Crónicas 33, 15)

  • por haberme abandonado y haber quemado incienso a dioses extranjeros provocando mi indignación con todas las obras de sus manos. Mi cólera se encenderá contra este lugar y no se apagará. (II Crónicas 34, 25)

  • Desde los días de nuestros padres hasta hoy hemos pecado gravemente. Por nuestras iniquidades, nosotros, nuestros reyes y nuestros sacerdotes hemos sido entregados a los reyes extranjeros, a la espada, a la esclavitud, al saqueo, al oprobio, como todavía ahora sucede. (Esdras 9, 7)

  • Los de la raza de Israel se separaron de todos los extranjeros y, puestos de pie, confesaron sus pecados y las iniquidades de sus padres. (Nehemías 9, 2)


“Deus ama quem segue o caminho da virtude.” São Padre Pio de Pietrelcina