Encontrados 334 resultados para: ejército sirio

  • Castiga a este hombre y a su ejército; caigan a espada. Acuérdate de sus blasfemias, y no les dejes vivir". (I Macabeos 7, 38)

  • Nicanor abandonó Jerusalén y acampó en Bejorón, donde se le unió el ejército de Siria. (I Macabeos 7, 39)

  • Así hoy extermina a este ejército que está ante nosotros, para que sepan los supervivientes que ha hablado inicuamente contra tu templo. Júzgalo según su perversidad". (I Macabeos 7, 42)

  • Cuando el ejército vio muerto a Nicanor, arrojó las armas y huyó. (I Macabeos 7, 44)

  • Habían vencido a Antíoco el Grande, rey de Asia, que les presentó batalla con ciento veinte elefantes, caballería y carros y un ejército incontable. (I Macabeos 8, 6)

  • Demetrio, al enterarse de la muerte de Nicanor y de la derrota de su ejército, decidió mandar a Judea otra vez a Báquides y Alcimo como jefes del ala derecha de su ejército. (I Macabeos 9, 1)

  • Judas, viendo la dispersión de su ejército cuando era inminente la lucha, se sintió profundamente apenado, pues no tenía tiempo para volverlos a juntar. (I Macabeos 9, 7)

  • El ejército enemigo salió del campo y le hizo frente con la caballería dividida en dos alas; los hombres y los arqueros, todos valientes, avanzaban a la cabeza del ejército como fuerza de choque. Báquides iba en el ala derecha. (I Macabeos 9, 11)

  • El ejército, dividido en dos partes, avanzaba al sonido de las trompetas. (I Macabeos 9, 12)

  • Judas se dio cuenta de que Báquides y la parte más fuerte del ejército estaban en la derecha, y, juntándose con los más decididos, (I Macabeos 9, 14)

  • Informaron de esto a Báquides en día de sábado, y él y su ejército atravesaron rápidamente el Jordán. (I Macabeos 9, 34)

  • Báquides se puso en camino con un ejército numeroso. Mandó clandestinamente cartas a sus partidarios de Judea para que prendiesen a Jonatán y a los suyos; pero no tuvo éxito, porque fueron descubiertos sus planes. (I Macabeos 9, 60)


“Para que se preocupar com o caminho pelo qual Jesus quer que você chegue à pátria celeste – pelo deserto ou pelo campo – quando tanto por um como por outro se chegará da mesma forma à beatitude eterna?” São Padre Pio de Pietrelcina