Encontrados 327 resultados para: derechos de las mujeres

  • Les dijo: "Éstos son los derechos del rey que va a reinar sobre vosotros: tomará a vuestros hijos, se servirá de ellos para sus carros y sus caballos y los hará correr ante su carro. (I Samuel 8, 11)

  • Anda, castiga a Amalec y destruye sin piedad todas sus cosas; mata hombres y mujeres, mayores y pequeños, bueyes y ovejas, camellos y asnos". (I Samuel 15, 3)

  • Y dijo Samuel: "Como tu espada ha dejado sin hijos a tantas mujeres, así tu madre entre todas quedará privada de su hijo". Samuel mató a Agag ante el Señor en Guilgal. (I Samuel 15, 33)

  • Al volver David de la guerra después de dar muerte al filisteo, las mujeres salían de todas las ciudades de Israel, cantando y danzando ante el rey Saúl al son de tambores y arpas y con gritos de alegría; (I Samuel 18, 6)

  • El sacerdote respondió: "No tengo a mano pan ordinario; no hay más que pan santo, si es que tus hombres se han abstenido al menos de relaciones con mujeres". (I Samuel 21, 5)

  • David contestó: "Seguro; siempre que salimos nos abstenemos de mujeres, aunque se trate de un viaje de carácter profano; con más razón hoy mis hombres están limpios". (I Samuel 21, 6)

  • A Nob, ciudad sacerdotal, Saúl la pasó a espada: hombres y mujeres, niños, hasta los de pecho, bueyes, asnos y ovejas. (I Samuel 22, 19)

  • David se casó también con Ajinoán, de Yezrael; las dos fueron sus mujeres. (I Samuel 25, 43)

  • Se estableció con sus hombres junto a Aquís, en Gat, cada uno con su familia; David con sus dos mujeres: Ajinoán de Yezrael y Abigaíl, la mujer de Nabal del Carmelo. (I Samuel 27, 3)

  • Habían hecho prisioneros a las mujeres y a todos los demás, chicos y grandes, pero sin matar a nadie. Los habían llevado y proseguían su camino. (I Samuel 30, 2)

  • Cuando David y sus hombres llegaron a la ciudad y vieron que había sido quemada y que sus mujeres, sus hijos e hijas habían sido llevados prisioneros, (I Samuel 30, 3)

  • También las dos mujeres de David, Ajinoán de Yezrael y Abigaíl, mujer de Nabal del Carmelo, habían sido hechas prisioneras. (I Samuel 30, 5)


“Quanto maiores forem os dons, maior deve ser sua humildade, lembrando de que tudo lhe foi dado como empréstimo.” São Padre Pio de Pietrelcina