Encontrados 1846 resultados para: batalla en Israel
El escudo de sus guerreros es rojo, sus soldados visten de escarlata; brilla en los carros el acero cuando se alinean para la batalla y se agitan las lanzas. (Nahún 2, 4)
Por eso, ¡por mi vida!, dice el Señor omnipotente, Dios de Israel, que Moab será como Sodoma, y los hijos de Amón como Gomorra: campos de cardos, montón de sal, desolación eterna. Los supervivientes de mi pueblo los saquearán, los que queden de mi nación los heredarán. (Sofonías 2, 9)
el resto de Israel, que no cometerá injusticias, ni dirá mentiras, ni tendrá en su boca lengua falsa; pastarán y reposarán sin que nadie les inquiete. (Sofonías 3, 13)
¡Canta himnos, hija de Sión, alégrate, Israel, regocíjate y goza de todo corazón, hija de Jerusalén! (Sofonías 3, 14)
El Señor ha retirado la sentencia que pesaba contra ti, ha alejado a tus enemigos; el Señor, rey de Israel, está en medio de ti; no tienes que temer ya ningún mal. (Sofonías 3, 15)
Y pregunté al ángel que hablaba conmigo: "¿Qué son estos cuernos? Y me contestó: Éstos son los cuernos que dispersaron a Judá, Israel y Jerusalén. (Zacarías 2, 2)
Y así como antes erais maldecidos por las gentes, casa de Judá y casa de Israel, así ahora os libraré y seréis bendecidos. No temáis y cobrad ánimo". (Zacarías 8, 13)
La palabra del Señor ha pasado por el país de Jadrac y se ha parado en Damasco, pues al Señor pertenecen las ciudades de Siria, así como todas las tribus de Israel. (Zacarías 9, 1)
Mi ira se ha encendido contra los pastores, castigaré a los machos cabríos. Sí, el Señor todopoderoso visitará su rebaño -la casa de Judá- y le hará como un caballo brioso en la batalla. (Zacarías 10, 3)
Serán como héroes en la batalla que pisan el polvo de las calles; pelearán porque el Señor está con ellos, y los jinetes serán cubiertos de vergüenza. (Zacarías 10, 5)
A continuación rompí el segundo cayado, Unión, para romper la hermandad entre Judá e Israel. (Zacarías 11, 14)
Palabra del Señor sobre Israel. Palabra del Señor, el que extendió los cielos, puso los cimientos sobre la tierra y ha formado el espíritu en el interior del hombre. (Zacarías 12, 1)