Encontrados 87 resultados para: baal-berit

  • Porque tus dioses, oh Judá, son tan numerosos como tus ciudades; y tantos como las calles que hay en Jerusalén son los altares de infamia que vosotros habéis levantado para ofrecer incienso a Baal. (Jeremías 11, 13)

  • Pues el Señor todopoderoso, que te había plantado, ha decretado contra ti la desgracia a causa de las iniquidades cometidas por la casa de Israel y la casa de Judá, que me han irritado quemando incienso a Baal". (Jeremías 11, 17)

  • Y si aprenden bien los caminos de mi pueblo, si aprenden a jurar en mi nombre: "¡Vive Dios!", como ellos enseñaron a mi pueblo a jurar por Baal, entonces serán establecidos en medio de mi pueblo. (Jeremías 12, 16)

  • Han construido lugares de culto a Baal para quemar a sus propios hijos en su honor, cosa que yo no había prescrito ni ordenado, ni se me había ocurrido jamás. (Jeremías 19, 5)

  • En los profetas de Samaría vi cosas repugnantes: profetizaban en nombre de Baal y pervertían a mi pueblo Israel. (Jeremías 23, 13)

  • Con los sueños que se cuentan unos a otros tratan de hacer que mi pueblo se olvide de mi nombre, como sus padres se olvidaron de mi nombre por Baal. (Jeremías 23, 27)

  • Los caldeos que están atacando esta ciudad vendrán y la prenderán fuego, incendiarán sus casas, sobre cuyas terrazas se han ofrecido sacrificios a Baal y se han hecho ofrendas a dioses extraños para irritarme. (Jeremías 32, 29)

  • Y han construido además los lugares de culto a Baal en el valle de Ben-Hinnón para sacrificar a sus hijos y a sus hijas a Moloc, cosa que yo no les había ordenado, ni había pasado jamás por mi mente que se cometiera tal horror para arrastrar a Judá al pecado. (Jeremías 32, 35)

  • por eso yo abro la espalda de Moab; destruyo sus ciudades hasta la última, la gloria del país, Bet Yesimot, Baal Meón y Quiriatáyim. (Ezequiel 25, 9)

  • Sí, aquel día -dice el Señor- ella me llamará: "Marido mío", y no me llamará más: "Baal mío". (Oseas 2, 18)

  • Se han vuelto a Baal, se han hecho como un arco engañoso. A espada sus príncipes caerán por la ira de su lengua, y en Egipto se hará burla de ellos. (Oseas 7, 16)

  • Como uva en el desierto encontré yo a Israel, como breva de higuera vi a vuestros padres. Pero al llegar a Baal Fegor se consagraron a la infamia, y se hicieron despreciables como el objeto de su amor. (Oseas 9, 10)


“A meditação não é um meio para chegar a Deus, mas um fim. A finalidade da meditação é o amor a Deus e ao próximo.” São Padre Pio de Pietrelcina