Encontrados 5031 resultados para: alimento para el alma

  • Si alguno ve a su hermano cometer un pecado que lleve a la muerte, rece por él, y Dios le dará la vida; esto lo digo para los pecados que no llevan a la muerte. Hay un pecado que lleva a la muerte; por éste no digo que recen. (I Juan 5, 16)

  • Sabemos también que el Hijo de Dios ha venido y nos ha dado inteligencia para conocer al Verdadero. Nosotros estamos en el Verdadero, en su Hijo Jesucristo. Él es el verdadero Dios y la vida eterna. (I Juan 5, 20)

  • Estad alerta, para que no perdáis el fruto de vuestros trabajos, sino para que recibáis una recompensa plena. (II Juan 1, 8)

  • Tengo muchas más cosas que escribiros, pero no he querido hacerlo en papel y tinta, pues espero ir pronto a veros y hablaros de viva voz, para que vuestra alegría sea completa. (II Juan 1, 12)

  • ellos han dado público testimonio de tu amor ante la Iglesia. Harás muy bien en darles todo lo que necesiten para el viaje, como Dios se merece. (III Juan 1, 6)

  • Es nuestro deber acoger a estos hombres, para ser así cooperadores de la verdad. (III Juan 1, 8)

  • Judas, siervo de Jesucristo, hermano de Santiago, a los elegidos y amados de Dios Padre y conservados para Jesucristo: (Judas 1, 1)

  • Queridísimos, tenía un gran deseo de escribiros acerca de nuestra común salvación, y me he visto obligado a hacerlo para exhortaros a luchar por la fe, que de una vez para siempre ha sido transmitida a los creyentes. (Judas 1, 3)

  • y ha reservado en eterna prisión, en el fondo de las tinieblas, para el día del juicio final, a los ángeles que no guardaron su condición privilegiada y perdieron su propia mansión; (Judas 1, 6)

  • Pero ellos injurian aun a lo que no conocen; y lo que conocen por instinto, como los animales, sólo les sirve para su ruina. (Judas 1, 10)

  • Estos son una vergüenza para vuestras comidas fraternas, comen y beben desvergonzadamente, cebándose a sí mismos. Nubes sin agua arrastradas por el viento; arboles infructuosos en el otoño, dos veces muertos, arrancados de cuajo; (Judas 1, 12)

  • conservaos en el amor de Dios, aguardando la misericordia de nuestro Señor Jesucristo para la vida eterna. (Judas 1, 21)


“Que Nossa Senhora nos obtenha o amor à cruz, aos sofrimentos e às dores.” São Padre Pio de Pietrelcina