Encontrados 38 resultados para: Zeb

  • Hicieron prisioneros a los dos jefes madianitas, Oreb y Zeb; mataron a Oreb en la roca de Oreb, y a Zeb en el lagar de Zeb. Persiguieron a los madianitas, y llevaron a Gedeón, al otro lado del Jordán, las cabezas de Oreb y Zeb. (Jueces 7, 25)

  • El Señor puso en vuestras manos a los jefes madianitas, Oreb y Zeb. Lo que yo he hecho, ¿puede compararse con lo que habéis hecho vosotros?". Ante estas palabras, ellos se calmaron. (Jueces 8, 3)

  • Entonces dijo a la gente de Sucot: "Dad, por favor, tortas de pan a la gente que me sigue, porque están extenuados, y yo quiero continuar persiguiendo a Zébaj y a Salmuná, reyes madianitas". (Jueces 8, 5)

  • Pero los jefes de Sucot respondieron: "¿Acaso tienes ya en tus manos a Zébaj y a Salmuná, para que debamos suministrar pan a tu ejército?". (Jueces 8, 6)

  • Gedeón contestó: "Bien, cuando el Señor entregue en mi mano a Zébaj y a Salmuná, yo desgarraré vuestras carnes con espinas y cardos del desierto". (Jueces 8, 7)

  • Zébaj y Salmuná estaban en Carcor con sus ejércitos, alrededor de quince mil hombres, todos los que habían quedado del ejército del oriente. Habían caído ciento veinte mil guerreros. (Jueces 8, 10)

  • Zébaj y Salmuná huyeron; pero Gedeón los persiguió, e hizo prisioneros a los dos reyes de Madián, Zébaj y Salmuná, y derrotó a todo su ejército. (Jueces 8, 12)

  • Gedeón se presentó a la gente de Sucot, y dijo: "Aquí están Zébaj y Salmuná, por los que os burlasteis de mí diciendo: ¿Acaso tienes ya en tus manos a Zébaj y a Salmuná para que debamos suministrar pan a tu ejército?". (Jueces 8, 15)

  • Después preguntó a Zébaj y Salmuná: "¿Cómo eran los hombres que matasteis en el Tabor?". Ellos respondieron: "Eran como tú; cada uno de ellos parecía un príncipe". (Jueces 8, 18)

  • Entonces Zébaj y Salmuná dijeron: "Ánimo, mátanos tú; porque como es el hombre, así es su fuerza". Entonces Gedeón se levantó, mató a Zébaj y Salmuná y se quedó con las lunetas que llevaban al cuello sus camellos. (Jueces 8, 21)

  • Entonces Gaal, hijo de Obed, dijo: "¿Qué es Abimelec y quién es Siquén para que debamos ser sus siervos? ¿No sirvió el hijo de Yerubaal y Zebul, su lugarteniente, a las gentes de Jamor, padre de Siquén? ¿Por qué, entonces, debemos servirles nosotros? (Jueces 9, 28)

  • Cuando Zebul, gobernador de la ciudad, se enteró de lo que andaba diciendo Gaal, hijo de Obed, montó en cólera, (Jueces 9, 30)


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