Encontrados 386 resultados para: Tribu de Benjamín

  • "Di a Roboán, hijo de Salomón, rey de Judá, y a todos los israelitas de Judá y Benjamín: (II Crónicas 11, 3)

  • Sora, Ayalón y Hebrón, todas en Judá y Benjamín. (II Crónicas 11, 10)

  • Las armó asimismo de escudos y lanzas con el fin de hacerlas lo más fuertes posible y poder mantener su dominio en Judá y Benjamín. (II Crónicas 11, 12)

  • Tuvo la sagacidad de repartir a sus hijos por todos los territorios de Judá y de Benjamín y las ciudades fortificadas, les dio abundancia de provisiones y les procuró muchas mujeres. (II Crónicas 11, 23)

  • Asá disponía de un ejército de 300.000 hombres armados de escudo y lanza en Judá, y 280.000 armados de escudo y arco en Benjamín, todos hombres valerosos. (II Crónicas 14, 7)

  • salió al encuentro de Asá y le dijo: "Óyeme, Asá, y escuchadme todos los de Judá y Benjamín. El Señor está con vosotros porque vosotros estáis con él. Cuando vosotros le buscáis, él se deja encontrar por vosotros; pero si lo abandonáis, él se aleja. (II Crónicas 15, 2)

  • Con estas palabras del profeta Azarías, hijo de Oded, Asá se sintió fortalecido e hizo desaparecer los ídolos de toda la tierra de Judá y de Benjamín y de las ciudades que había conquistado en la montaña de Efraín; restauró de nuevo el altar del Señor, que estaba delante del vestíbulo del Señor. (II Crónicas 15, 8)

  • Convocó a todo Judá y Benjamín, y a los de Efraín, Manasés y Simeón, que habitaban entre ellos, pues muchos de los de Israel se habían pasado al lado de Asá al ver que el Señor, su Dios, estaba con él. (II Crónicas 15, 9)

  • Por Benjamín: el valeroso Eliadá, con 200.000 hombres armados con escudo y arco; (II Crónicas 17, 17)

  • Los hombres de Judá y Benjamín, con Josafat a la cabeza, regresaron llenos de gozo a Jerusalén, pues el Señor les había otorgado la alegría a costa de sus enemigos. (II Crónicas 20, 27)

  • Amasías reunió a los de Judá y los distribuyó en familias patriarcales bajo jefes de millar y centuria, por todo Judá y Benjamín. Registró a todos los mayores de veinte años, y sumaban trescientos mil hombres escogidos, aptos para la guerra y diestros en la lanza y el escudo. (II Crónicas 25, 5)

  • Cuando todo acabó, los israelitas que habían estado presentes recorrieron las ciudades de Judá destruyendo los cipos sagrados, las imágenes de Aserá, los lugares de culto de las colinas y los altares en todo Judá, Benjamín, Efraín y Manasés hasta su extinción total. Luego regresaron a sus ciudades, cada uno a su propiedad. (II Crónicas 31, 1)


“O temor e a confiança devem dar as mãos e proceder como irmãos. Se nos damos conta de que temos muito temor devemos recorrer à confiança. Se confiamos excessivamente devemos ter um pouco de temor”. São Padre Pio de Pietrelcina