Encontrados 303 resultados para: Siervo

  • Di a mi siervo David: Esto dice el Señor todopoderoso: Yo te saqué del aprisco, de detrás de las ovejas, para que fueras el jefe de mi pueblo, Israel. (II Samuel 7, 8)

  • Y aun esto es todavía poco para ti, Señor, y extiendes también tu promesa a la casa de tu siervo para un futuro lejano, para la duración misma de la humanidad. (II Samuel 7, 19)

  • ¿Qué más podría decirte David? Tú conoces a tu siervo, Señor. (II Samuel 7, 20)

  • Por amor a tu siervo has hecho todas estas maravillas y las has dado a conocer. (II Samuel 7, 21)

  • Y ahora, Señor, mantén firme para siempre la promesa que has hecho a tu siervo y a su casa, y haz como has dicho. (II Samuel 7, 25)

  • Que tu nombre sea siempre engrandecido; y que digan: El Señor todopoderoso es Dios de Israel. Y que la casa de tu siervo David sea estable en tu presencia, (II Samuel 7, 26)

  • ya que tú, Señor todopoderoso, Dios de Israel, has prometido a tu siervo que le edificarás una casa; por eso se ha atrevido a dirigirte esta súplica. (II Samuel 7, 27)

  • Sí, Señor, tú eres Dios, tus palabras son verdad, y has hecho a tu siervo esta gran promesa. (II Samuel 7, 28)

  • Dígnate bendecir la casa de tu siervo para que permanezca siempre en tu presencia. Porque eres tú, Señor, el que has hablado, y con tu bendición la casa de tu siervo será bendita para siempre". (II Samuel 7, 29)

  • Había un siervo de la casa de Saúl, llamado Sibá. Lo mandaron venir, y el rey le dijo: "¿Tú eres Sibá?". Él respondió: "Para servirte". (II Samuel 9, 2)

  • Cuando Meribaal, hijo de Jonatán, hijo de Saúl, llegó junto a David, se postró en tierra. David dijo: "¡Meribaal!". Y él respondió: "Aquí tienes a tu siervo". (II Samuel 9, 6)

  • Él se postró y dijo: "¿Quién es tu siervo para que te fijes en un perro muerto como yo?". (II Samuel 9, 8)


“A ingenuidade e’ uma virtude, mas apenas ate certo ponto; ela deve sempre ser acompanhada da prudência. A astúcia e a safadeza, por outro lado, são diabólicas e podem causar muito mal.” São Padre Pio de Pietrelcina