Encontrados 127 resultados para: Servidores

  • Abimelec se levantó de madrugada y llamó a todos sus servidores. Les refirió todo lo ocurrido, y aquellos hombres se llenaron de miedo. (Génesis 20, 8)

  • En efecto, al tercer día, que era su cumpleaños, el Faraón dio un banquete a todos sus servidores, y entre todos se acordó del primer copero y del primer panadero. (Génesis 40, 20)

  • Irritado el Faraón contra sus servidores, nos había metido en la cárcel, en casa del capitán de la guardia, a mí y al primer panadero. (Génesis 41, 10)

  • Esta propuesta pareció bien al Faraón y a todos sus servidores. (Génesis 41, 37)

  • Llegó a casa del Faraón la noticia de que habían venido los hermanos de José, y el Faraón y sus servidores se alegraron. (Génesis 45, 16)

  • El río bullirá de ranas, que subirán y penetrarán en tu casa, en tu dormitorio, en tu lecho, en la casa de tus servidores y de tu pueblo, en tus hornos y en tus artesas. (Exodo 7, 28)

  • Contra ti, contra tu pueblo y contra todos tus servidores subirán las ranas". (Exodo 7, 29)

  • Moisés dijo al Faraón: "Dime cuándo he de rogar por ti, por tus servidores y por todo tu pueblo para que el Señor aleje de ti y de tu pueblo las ranas y se queden sólo en el río". (Exodo 8, 5)

  • Las ranas se alejarán de ti y de tus casas, de tus servidores y de todo el pueblo; solamente quedarán en el río". (Exodo 8, 7)

  • Si no le dejas salir, yo enviaré sobre ti y tus servidores, sobre tu pueblo y sobre tus casas, tábanos que llenarán las casas de los egipcios y el suelo que pisan. (Exodo 8, 17)

  • El Señor lo hizo así, y enjambres de tábanos invadieron la casa del Faraón y las de sus servidores; en todo Egipto la tierra quedó infestada de tábanos. (Exodo 8, 20)

  • Moisés dijo: "Al salir de tu casa rezaré por ti al Señor, y mañana se alejarán los tábanos de ti, de tus servidores y de tu pueblo; pero que el Faraón no nos engañe una vez más y deje ir al pueblo para ofrecer sacrificios al Señor". (Exodo 8, 25)


“Tenhamos sempre horror ao pecado mortal e nunca deixemos de caminhar na estrada da santa eternidade.” São Padre Pio de Pietrelcina