Encontrados 33 resultados para: Ocozías

  • los cuales fueron contra Judá, la invadieron y se llevaron todo lo que encontraron en el palacio del rey, incluidos mujeres e hijos, menos a Ocozías, el más pequeño de todos. (II Crónicas 21, 17)

  • Los habitantes de Jerusalén proclamaron rey a Ocozías, el menor de sus hijos, pues todos los demás habían sido asesinados por las tropas árabes cuando invadieron el campamento. Así subió al trono Ocozías, hijo de Jorán, rey de Judá. (II Crónicas 22, 1)

  • También Ocozías siguió la conducta de la casa de Ajab, guiado por los consejos de su madre. (II Crónicas 22, 3)

  • que se vio obligado a retirarse a Yezrael para curarse de las heridas recibidas en Ramot mientras luchaba contra Jazael, rey de Siria. Ocozías, hijo de Jorán, rey de Judá, fue a visitar a Jorán, hijo de Ajab, en Yezrael, mientras convalecía. (II Crónicas 22, 6)

  • Dios tenía prevista esta visita a Jorán para ruina de Ocozías; pues, a su llegada, salió con Jorán al encuentro de Jehú, hijo de Nimsí, a quien el Señor había ungido para exterminar a la casa de Ajab. (II Crónicas 22, 7)

  • Mientras Jehú hacía justicia con la casa de Ajab, se encontró con los jefes de Judá y los sobrinos de Ocozías, que le prestaban servicio, y los mató. (II Crónicas 22, 8)

  • Mandó buscar a Ocozías, que fue alcanzado cuando iba a esconderse a Samaría. Se lo llevaron a Jehú, que lo mandó matar. Le dieron sepultura, pues se dijeron: "Es hijo de Josafat, que buscó al Señor con todo su corazón". En la casa de Ocozías no quedó nadie que fuera capaz de reinar. (II Crónicas 22, 9)

  • Entonces la madre de Ocozías, al ver que su hijo había muerto, fue y exterminó a toda la descendencia real de la casa de Judá. (II Crónicas 22, 10)

  • Pero, cuando estaban matando a los hijos del rey, Josebá, hija del rey, tomó a Joás, hijo de Ocozías, y lo escondió con su nodriza en el dormitorio. De esta manera, Josebá, hija del rey Jorán, mujer del sacerdote Yehoyadá y hermana de Ocozías, lo libró de Atalía, que no lo mató. (II Crónicas 22, 11)


“Todas as graças que pedimos no nome de Jesus são concedidas pelo Pai eterno.” São Padre Pio de Pietrelcina