Encontrados 91 resultados para: Juicio
"Harás el pectoral del juicio, artísticamente recamado, a la manera del efod: de oro, púrpura violeta, escarlata y carmesí, y de lino trenzado. (Exodo 28, 15)
De este modo, cuando entre Aarón en el santuario, llevará los nombres de las tribus de Israel en el pectoral del juicio, sobre su corazón, para recuerdo perpetuo ante el Señor. (Exodo 28, 29)
Y en el pectoral del juicio pondrás los "urim" y los "tummim" para que estén sobre el corazón de Aarón cuando entre a la presencia del Señor, llevando continuamente sobre el corazón, ante el Señor, el juicio de los israelitas". (Exodo 28, 30)
Estas ciudades os servirán de asilo contra el vengador de sangre, para que no sea matado el homicida antes de comparecer en juicio ante la comunidad. (Números 35, 12)
No tengáis en cuenta en vuestros juicios la apariencia de la persona; oíd a los pequeños lo mismo que a los grandes sin temor a nadie, pues el juicio pertenece a Dios. Y si os encontráis con alguna causa difícil, traedla a mí para que yo la resuelva. (Deuteronomio 1, 17)
Se quedará en esa ciudad hasta que haya comparecido en juicio ante la comunidad, hasta la muerte del sumo sacerdote que esté en funciones en aquellos días. Entonces el homicida podrá marchar y entrar en su ciudad y en su casa, en la ciudad de donde había huido". (Josué 20, 6)
Absalón se levantaba pronto, se ponía junto al camino que lleva a la puerta y, cuando un hombre tenía un pleito que le llevaba ante el rey para el juicio, le llamaba y le decía: "¿De qué ciudad eres?". Él respondía: "Tu servidor es de tal tribu de Israel". (II Samuel 15, 2)
Y continuaba: "¡Quién me constituyese juez en el país, para que todos los que tuviesen un juicio o un pleito viniesen a mí y yo les hiciese justicia!". (II Samuel 15, 4)
¡Ay de las naciones que se enfrentan a mi raza! El Señor omnipotente las castigará en el día del juicio, pondrá fuego y gusanos en sus cuerpos y llorarán atormentados para siempre". (Judit 16, 17)
Se han cumplido estos dos destinos en la hora, tiempo y día establecidos por Dios y en la hora de su juicio. (Ester 10, 11)
Pues él no es un hombre como yo para discutir con él y comparecer juntos en juicio. (Job 9, 32)
Si él se presenta, encarcela y cita a juicio, ¿quién le hará desistir? (Job 11, 10)