Encontrados 1124 resultados para: Gedeón y los 300 hombres

• y para que nosotros nos veamos libres de los hombres malos y perversos, porque no todos son de fiar. (II Tesalonicenses 3, 2)

• Te ruego, ante todo, que se hagan peticiones, oraciones, súplicas, acciones de gracias por todos los hombres, (I Timoteo 2, 1)

• el cual quiere que todos los hombres se salven y lleguen al conocimiento de la verdad. (I Timoteo 2, 4)

• Porque hay un solo Dios y un solo mediador entre Dios y los hombres, Cristo Jesús, también él hombre, (I Timoteo 2, 5)

• Quiero, pues, que los hombres oren en todo lugar levantando sus manos limpias, sin ira ni rencores. (I Timoteo 2, 8)

• Asimismo, que los diáconos sean hombres dignos, formales, no aficionados a la bebida y a los negocios sucios. (I Timoteo 3, 8)

• Por esto nos esforzamos y luchamos, porque tenemos puesta nuestra esperanza en Dios vivo, que es el Salvador de todos los hombres, sobre todo de los creyentes. (I Timoteo 4, 10)

• Los delitos de algunos hombres son conocidos aun antes del juicio; los de otros, sólo con ocasión de él. (I Timoteo 5, 24)

• Pues los que quieren enriquecerse caen en la tentación y en la trampa de deseos insensatos y funestos que hunden a los hombres en la ruina y en la perdición. (I Timoteo 6, 9)

• y las cosas que me oíste a mí ante muchos testigos, confíalas a hombres leales, capaces de enseñárselas a otros. (II Timoteo 2, 2)

• Pues los hombres serán egoístas, amigos del dinero, altivos, orgullosos, blasfemos, rebeldes con los padres, ingratos, injustos, (II Timoteo 3, 2)

• Lo mismo que Janes y Jambrés se opusieron a Moisés, así también éstos se oponen a la verdad, hombres de mente corrompida, pervertidos en cuanto a la fe. (II Timoteo 3, 8)