Encontrados 351 resultados para: Bajó
Bajo el borde había alrededor de la pila dos series de figuras como de toros, veinte cada metro, fundidas con la pila en una sola pieza. (II Crónicas 4, 3)
Los sacerdotes pusieron el arca de la alianza del Señor en el lugar santísimo del templo, bajo las alas de los querubines, (II Crónicas 5, 7)
Cuando Salomón terminó su oración, bajó fuego del cielo, que consumió los holocaustos y las víctimas, y la gloria del Señor llenó el templo, (II Crónicas 7, 1)
bajo sus órdenes el jefe Yehojanán, con 280.000; (II Crónicas 17, 15)
bajo sus órdenes Amasías, hijo de Zicrí, que se había consagrado voluntariamente al servicio del Señor, con 200.000. (II Crónicas 17, 16)
bajo sus órdenes Yehozabad, con 180.000 prontos para el combate. (II Crónicas 17, 18)
Puso porteros en las entradas del templo del Señor, para que bajo ningún pretexto entrara nadie impuro. (II Crónicas 23, 19)
Amasías reunió a los de Judá y los distribuyó en familias patriarcales bajo jefes de millar y centuria, por todo Judá y Benjamín. Registró a todos los mayores de veinte años, y sumaban trescientos mil hombres escogidos, aptos para la guerra y diestros en la lanza y el escudo. (II Crónicas 25, 5)
Tenía un ejército en pie de guerra, organizado por escuadrones, según el censo hecho bajo la supervisión del escriba Yeiel y del comisario Maseyas; el ejército estaba bajo las órdenes de Jananías, uno de los jefes reales. (II Crónicas 26, 11)
Ofreció sacrificios y quemó ofrendas en los altozanos, en las colinas y bajo cualquier árbol frondoso. (II Crónicas 28, 4)
Yejiel, Azazías, Najat, Asael, Yerimot, Yozabad, Eliel, Jismaquías, Májat y Benayas eran inspectores bajo la dirección de Conanías y su hermano Simeí, según las órdenes del rey Ezequías y las de Azarías, prefecto del templo. (II Crónicas 31, 13)
Bajo sus órdenes estaban Eden, Minyamín, Jesúa, Semayas, Amarías y Secanías, los cuales residían permanentemente en las ciudades sacerdotales para hacer la distribución entre sus hermanos divididos en clases, lo mismo a grandes que a pequeños, (II Crónicas 31, 15)