Encontrados 359 resultados para: Arca de la Alianza

  • Todo Israel, sus ancianos, sus funcionarios y sus jueces, estaban en pie a los dos lados del arca ante los sacerdotes y levitas que llevaban el arca de la alianza del Señor; tanto los extranjeros como los ciudadanos se colocaron la mitad del lado del monte Garizín y la otra mitad del lado del monte Ebal, como Moisés, siervo del Señor, había mandado, cuando bendijo por primera vez al pueblo de Israel. (Josué 8, 33)

  • si rompéis la alianza que el Señor, vuestro Dios, os ha impuesto y os vais a servir a otros dioses; si os prosternáis ante ellos, entonces la ira del Señor se encenderá contra vosotros y muy pronto os hará desaparecer de esta buena tierra que él os ha dado". (Josué 23, 16)

  • El ángel del Señor subió de Guilgal a Betel y dijo: "Yo os saqué de Egipto y os traje a esta tierra que había prometido con juramento a vuestros padres, diciendo: No romperé jamás mi alianza con vosotros. (Jueces 2, 1)

  • La ira del Señor se encendió contra Israel y dijo: "Ya que esta generación ha violado la alianza que yo había establecido con sus padres y no me ha obedecido, (Jueces 2, 20)

  • Después consultaron al Señor. En aquel tiempo estaba allí el arca de la alianza del Señor, (Jueces 20, 27)

  • La lámpara de Dios todavía no estaba apagada, y Samuel dormía en el templo del Señor, donde estaba el arca de Dios. (I Samuel 3, 3)

  • El pueblo volvió al campamento, y los ancianos se preguntaron: "¿Por qué nos ha derrotado hoy el Señor ante los filisteos? Vamos a buscar a Silo el arca de la alianza del Señor, y que vaya con nosotros; así nos librará de la mano de nuestros enemigos". (I Samuel 4, 3)

  • El pueblo mandó mensajeros a Silo, y se trajo de allí el arca de la alianza del Señor todopoderoso, que se sienta sobre los querubines. Los dos hijos de Elí, Jofní y Fineés, acompañaban el arca. (I Samuel 4, 4)

  • Cuando el arca de la alianza del Señor llegó al campamento, todo Israel la recibió con tales gritos que la tierra temblaba. (I Samuel 4, 5)

  • Oyeron los gritos los filisteos y preguntaron: "¿Qué significa este clamor tan grande en el campamento de los hebreos?". Y supieron que el arca del Señor había llegado al campamento. (I Samuel 4, 6)

  • el arca de Dios fue capturada y los hijos de Elí, Jofní y Fineés, murieron. (I Samuel 4, 11)

  • Cuando llegó, Elí estaba sentado en su silla, al lado de la puerta, a la expectativa, pues su corazón temía por el arca de Dios. El hombre entró en la ciudad para contarlo, y toda la ciudad comenzó a gritar. (I Samuel 4, 13)


“Como Jesus, preparemo-nos a duas ascensões: uma ao Calvário e outra ao Céu. A ascensão ao Calvário, se não for alegre, deve ao menos ser resignada!” São Padre Pio de Pietrelcina