Encontrados 159 resultados para: Abner y Joab

  • Abner dijo a los ancianos de Israel: "Hace tiempo que deseáis tener a David por vuestro rey. (II Samuel 3, 17)

  • Fue acompañado de veinte hombres, y David ofreció un banquete a Abner y a los hombres que le acompañaban. (II Samuel 3, 20)

  • Abner dijo a David: "Me voy a reunir a todo Israel junto a mi señor el rey. Ellos harán un pacto según los deseos de tu corazón". David despidió a Abner, que se marchó en paz. (II Samuel 3, 21)

  • Los hombres de David y Joab llegaron de una expedición trayendo un gran botín. Abner ya no estaba con David en Hebrón, pues le había despedido y había marchado en paz. (II Samuel 3, 22)

  • Cuando llegaron Joab y todo el ejército que él mandaba, comunicaron a Joab que había venido Abner, hijo de Ner, y que el rey le había despedido y le había dejado ir en paz. (II Samuel 3, 23)

  • Entonces Joab se presentó al rey y le dijo: "¿Qué has hecho? Abner ha venido a verte; ¿por qué le has despedido y le has dejado ir en paz? (II Samuel 3, 24)

  • ¿Es que no conoces tú a Abner, hijo de Ner? Seguro que ha venido para engañarte, para conocer todos tus pasos y para saber lo que haces". (II Samuel 3, 25)

  • Joab, al salir de estar con David, envió mensajeros en persecución de Abner, que le hicieron volver desde la cisterna de Sirá, sin saberlo David. (II Samuel 3, 26)

  • Cuando Abner volvió a Hebrón, Joab le llevó aparte, al lado de la puerta, como para hablar pacíficamente con él, y allí le hirió mortalmente en el vientre, por la sangre de Asael, su hermano. (II Samuel 3, 27)

  • Cuando David supo lo que había pasado, dijo: "Yo y mi reino somos inocentes por siempre ante el Señor de la sangre de Abner, hijo de Ner. (II Samuel 3, 28)

  • Que caiga sobre la cabeza de Joab y de toda su familia y que no falte nunca en la casa de Joab quien padezca gonorrea o lepra, hombres que anden con bastón, que caigan bajo la espada o que pasen hambre". (II Samuel 3, 29)

  • Joab y su hermano Abisay mataron a Abner porque había dado muerte a su hermano Asael en la batalla de Gabaón. (II Samuel 3, 30)


“O Coração de Jesus não deixará cair no vazio a nossa oração se ela for plena de fé e de confiança.” São Padre Pio de Pietrelcina