Encontrados 231 resultados para: Ángel Rafael

  • Salió todavía del altar otro ángel, el que tiene poder sobre el fuego, y gritó con voz potente al que tenía la hoz afilada: "Echa tu hoz afilada y vendimia los racimos de la viña de la tierra, pues la uva está madura". (Apocalipsis 14, 18)

  • El ángel echó la hoz afilada sobre la tierra y vendimió la viña de la tierra, y arrojó las uvas en la gran cuba de la ira de Dios. (Apocalipsis 14, 19)

  • Y oí al ángel de las aguas que decía: Tú eres justo; tú, el que es, el que era; tú, el santo, al haber castigado así. (Apocalipsis 16, 5)

  • El ángel me dijo: "¿De qué te extrañas? Yo te explicaré el misterio de la mujer y de la bestia que la soporta, que tiene siete cabezas y diez cuernos. (Apocalipsis 17, 7)

  • El ángel me dijo: "Las aguas que has visto, sobre las que se sienta la prostituta, son los pueblos, las muchedumbres, las naciones y las lenguas. (Apocalipsis 17, 15)

  • Después de esto vi a otro ángel bajar del cielo con gran poder; la tierra fue iluminada con su esplendor. (Apocalipsis 18, 1)

  • Después un ángel vigoroso tomó una piedra, como una gran piedra de molino, y la tiró al mar, diciendo: Así, de un golpe, será tirada Babilonia, la gran ciudad, y no se la encontrará jamás. (Apocalipsis 18, 21)

  • Y el ángel me dijo: "Dichosos los invitados al banquete de las bodas del cordero". Y añadió: "Estas palabras de Dios dicen la verdad". (Apocalipsis 19, 9)

  • Después vi un ángel puesto de pie en el sol, que gritó con voz potente a todas las aves que volaban en el cielo: "Venid y reuníos para el gran banquete de Dios, (Apocalipsis 19, 17)

  • Vi un ángel que bajaba del cielo; tenía en la mano la llave del abismo y una gran cadena. (Apocalipsis 20, 1)

  • Midió su muralla: setenta y siete metros, medida de hombre, que es también medida de ángel. (Apocalipsis 21, 17)

  • El ángel me mostró un río de agua viva, transparente como un cristal, que manaba del trono de Dios y del cordero. (Apocalipsis 22, 1)


“Deus é servido apenas quando é servido de acordo com a Sua vontade.” São Padre Pio de Pietrelcina