Encontrados 208 resultados para: pecados

  • Pero no se humilló delante de Yahveh, como se había humillado su padre Manasés; al contrario, Amón cometió aún más pecados. (II Crónicas 33, 23)

  • estén atentos tus oídos y abiertos tus ojos para escuchar la oración de tu siervo, que yo hago ahora en tu presencia día y noche, por los hijos de Israel, tus siervos, confesando los pecados que los hijos de Israel hemos cometido contra ti; ¡yo mismo y la casa de mi padre hemos pecado! (Nehemías 1, 6)

  • La raza de Israel se separó de todos los extranjeros; y puestos en pie, confesaron sus pecados y las culpas de sus padres. (Nehemías 9, 2)

  • Sus muchos frutos son para los reyes, que por nuestros pecados tú nos impusiste, y que a capricho dominan nuestras personas, cuerpos y ganados. ¡En gran angustia nos hallamos! (Nehemías 9, 37)

  • Y ahora, Señor, acuérdate de mí y mírame. No me condenes por mis pecados, mis inadvertencias y las de mis padres. Hemos pecado en tu presencia, (Tobías 3, 3)

  • Pero cierto es, Señor, que todas tus sentencias a la verdad responden cuando me tratas según mis pecados y los de mis padres; porque no hemos cumplido tus mandatos, y no hemos caminado en la verdad delante de ti. (Tobías 3, 5)

  • y bendecirán al Dios de los siglos en justicia. Todos los israelitas salvados aquellos días se acordarán de Dios en verdad, se reunirán e irán a Jerusalén y les será dada la tierra de Abraham, que ellos habitarán por siempre y en seguridad. Y los que aman a Dios en verdad se alegrarán. Pero los que cometen pecados e injusticias desaparecerán de toda la tierra. (Tobías 14, 7)

  • Os conjuramos por el cielo y por la tierra, y por nuestro Dios, Señor de nuestros padres, que nos ha castigado por nuestros pecados, y por los pecados de nuestros padres, que cumpláis ahora mismo nuestros deseos.» (Judit 7, 28)

  • ¿Cuántas son mis faltas y pecados? ¡Mi delito, mi pecado, házmelos saber! (Job 13, 23)

  • En lugar de contar mi pasos, como ahora, no te cuidarías más de mis pecados; (Job 14, 16)

  • Jet. De los pecados de mi juventud no te acuerdes, pero según tu amor, acuérdate de mí. por tu bondad, Yahveh. (Salmos 25, 7)

  • (Qof.) Ve mi aflicción y mi penar, quita todos mis pecados. (Salmos 25, 18)


“A mulher forte é a que tem temor de Deus, a que mesmo à custa de sacrifício faz a vontade de Deus.” São Padre Pio de Pietrelcina