Encontrados 426 resultados para: nadie

  • Al oír el pueblo estas duras palabras, hizo duelo y nadie se vistió sus galas. (Exodo 33, 4)

  • Que nadie suba contigo, ni aparezca nadie en todo el monte. Ni oveja ni buey paste en el monte.» (Exodo 34, 3)

  • El primer nacido de asno lo rescatarás con una oveja; y si no lo rescatas, lo desnucarás. Rescatarás todos los primogénitos de tus hijos, y nadie se presentará ante mí con las manos vacías. (Exodo 34, 20)

  • Pues cuando yo expulse a los pueblos delante de ti y ensanche tus fronteras, nadie codiciará tu tierra cuando tres veces al año subas a presentarte ante Yahveh, tu Dios. (Exodo 34, 24)

  • Nadie debe estar en la Tienda del Encuentro cuando Aarón entre a hacer la expiación dentro del santuario, hasta que salga. Después de haber hecho expiación por sí mismo, por su casa y por toda la asamblea de Israel, (Levítico 16, 17)

  • Dijo Yahveh a Moisés: Habla a los sacerdotes, hijos de Aarón, y diles: Nadie se haga impuro por el cadáver de alguno de los suyos, (Levítico 21, 1)

  • Si vendéis algo a vuestro prójimo o le compráis algo, ved que nadie dañe a su hermano. (Levítico 25, 14)

  • Yo daré paz a la tierra y dormiréis sin que nadie os turbe; haré desaparecer del país las bestias feroces, y la espada no pasará por vuestra tierra. (Levítico 26, 6)

  • Me volveré contra vosotros y seréis derrotados ante vuestros enemigos; os tiranizarán los que os aborrecen y huiréis sin que nadie os persiga. (Levítico 26, 17)

  • A los que quedaren de vosotros, les infundiré pánico en sus corazones, en el país de sus enemigos; el ruido de una hoja caída los ahuyentará, huirán como quien huye de la espada, y caerán sin que nadie los persiga. (Levítico 26, 36)

  • Se atropellarán unos a otros, como delante de la espada, aunque nadie los persiga. No podréis teneros en pie en presencia de vuestros enemigos. (Levítico 26, 37)

  • Nadie, sin embargo, podrá consagrar los primogénitos de su ganado que ya, por ser tales, pertenecen a Yahveh. Sean del ganado mayor o del menor, pertenecen a Yahveh. (Levítico 27, 26)


“Lembre-se de que os santos foram sempre criticados pelas pessoas deste mundo, e puseram sob seus pés o mundo e as suas máximas .” São Padre Pio de Pietrelcina