Encontrados 144 resultados para: llevó

  • Llevó al rey de Israel la carta que decía: «Con la presente, te envío a mi siervo Naamán, para que le cures de su lepra.» (II Reyes 5, 6)

  • Eliseo les dijo: «No es éste el camino y no es ésta la ciudad. Venid detrás de mí y os llevaré donde el hombre que buscáis.» Y los llevó a Samaría. (II Reyes 6, 19)

  • Y le dijo: «Sube conmigo y verás mi celo por Yahveh»; y le llevó en su carro. (II Reyes 10, 16)

  • Joás, rey de Israel, capturó en Bet Semes a Amasías, rey de Judá, hijo de Joás, hijo de Ocozías, y lo llevó a Jerusalén. Abrió brecha de cuatrocientos codos en la muralla de Jerusalén desde la puerta de Efraím hasta la puerta del Angulo. (II Reyes 14, 13)

  • El rey ordenó a Jilquías, al segundo de los sacerdotes y a los encargados del umbral que sacaran del santuario de Yahveh todos los objetos que se habían hecho para Baal, para Aserá y para todo el ejército de los cielos; los quemó fuera de Jerusalén en los yermos del Cedrón y llevó sus cenizas a Betel. (II Reyes 23, 4)

  • El faraón Nekó puso por rey a Elyaquim, hijo de Josías, en lugar de su padre Josías, y le cambió el nombre en Yoyaquim. Cuando a Joacaz, le tomó y le llevó a Egipto, donde murió. (II Reyes 23, 34)

  • Se llevó de allí todos los tesoros de la Casa de Yahveh y los tesoros de la casa del rey, rompió todos los objetos de oro que había hecho Salomón, rey de Israel, para el santuario de Yahveh, según la palabra de Yahveh. (II Reyes 24, 13)

  • Todos los hombres de valor, en núnero de 7.000, los herreros y cerrajeros, un millar, todos los hombres aptos para la guerra, el rey de Babilonia los llevó deportados a Babilonia. (II Reyes 24, 16)

  • Los hijos de Sedecías fueron degollados a su vista, y a Sedecías le sacó los ojos, le encadenó y le llevó a Babilonia. (II Reyes 25, 7)

  • Nebuzaradán, jefe de la guardia, los tomó y los llevó a Riblá, donde el rey de Babilonia; (II Reyes 25, 20)

  • Beerá, hijo suyo, al cual Teglatfalasar, rey de Asiria, llevó cautivo. Era jefe de los rubenitas. (I Crónicas 5, 6)

  • Por lo cual el Dios de Israel suscitó el espíritu de Pil, rey de Asiria, que deportó a los rubenitas, los gaditas y la media tribu de Manasés, y los llevó a Jalaj, Jabor, Jará y el río Gozán, hasta el día de hoy. (I Crónicas 5, 26)


“Comunguemos com santo temor e com grande amor.” São Padre Pio de Pietrelcina