Encontrados 2485 resultados para: Pues

  • Dijo Yahveh a Aarón: «Vete al desierto al encuentro de Moisés.» Partió, pues, y le encontró en el monte de Dios y le besó. (Exodo 4, 27)

  • Fueron, pues, Moisés y Aarón y reunieron a todos los ancianos de los israelitas. (Exodo 4, 29)

  • Ellos dijeron: «El Dios de los hebreos se nos ha aparecido; permite, pues, que vayamos camino de tres días al desierto para ofrecer sacrificios a Yahveh, nuestro Dios, no sea que nos castigue con peste o espada.» (Exodo 5, 3)

  • Pero que hagan la misma cantidad de ladrillos que hacían antes, sin rebajarla; pues son unos perezosos. Y por eso claman diciendo: Vamos a ofrecer sacrificios a nuestro Dios. (Exodo 5, 8)

  • Esparcióse, pues, el pueblo por el país de Egipto en busca de rastrojo para emplearlo como paja. (Exodo 5, 12)

  • Pues, id a trabajar; no se os dará paja, y habéis de entregar la cantidad de ladrillos señalada.» (Exodo 5, 18)

  • Los escribas de los israelitas se vieron en grande aprieto, pues les ordenaron: «No disminuiréis vuestra producción diaria de ladrillos.» (Exodo 5, 19)

  • Encontráronse, pues, con Moisés y Aarón, que les estaban esperando a la salida de su entrevista con Faraón, (Exodo 5, 20)

  • Pues desde que fui a Faraón para hablarle en tu nombre está maltratando a este pueblo, y tú no haces nada por librarle.» (Exodo 5, 23)

  • Estos son, pues, aquel Aarón y aquel Moisés a quienes dijo Yahveh: «Sacad a los israelitas de la tierra de Egipto en orden de campaña.» (Exodo 6, 26)

  • Presentáronse, pues, Moisés y Aarón a Faraón, e hicieron lo que Yahveh había ordenado: Aarón echó su cayado delante de Faraón y de sus servidores, y se convirtió en serpiente. (Exodo 7, 10)

  • Los magos intentaron con sus encantamientos hacer salir mosquitos, pero no pudieron. Hubo, pues, mosquitos sobre hombres y ganados. (Exodo 8, 14)


“Se você não entrega seu coração a Deus, o que lhe entrega?” “Você deve seguir outra estrada. Tire de seu coração todas as paixões deste mundo, humilhe-se na poeira e reze! Dessa forma, certamente você encontrará Deus, que lhe dará paz e serenidade nesta vida e a eterna beatitude na próxima.” São Padre Pio de Pietrelcina