Encontrados 216 resultados para: Algunos

  • Pasaron algunos hombres que vieron el cadáver tirado en el camino y al león que permanecía junto al cadáver; entraron y lo contaron en la ciudad en que vivía el anciano profeta. (I Reyes 13, 25)

  • Salieron en cabeza los jóvenes de los jefes de distritos. Enviaron a avisar a Ben Hadad: «Han salido algunos jóvenes de Samaría.» (I Reyes 20, 17)

  • Abatió cada uno a su hombre. Aram se dio a la fuga e Israel le persiguió. Ben Hadad, rey de Aram, pudo salvarse a caballo con algunos jinetes. (I Reyes 20, 20)

  • El jefe de la guardia dejó algunos para viñadores y labradores de entre la gente pobre. (II Reyes 25, 12)

  • Algunos de los hijos de Simeón, en número de quinientos hombres, se fueron a la montaña de Seír; sus jefes eran Pelatías, Nearías, Refaías, Uzziel, hijos de Yisí: (I Crónicas 4, 42)

  • porque los cuatro jefes de los porteros eran permanentes; algunos levitas estaban al cuidado de las cámaras y de los tesoros de la Casa de Dios. (I Crónicas 9, 26)

  • Entre los quehatitas, sus hermanos, algunos estaban encargados de poner en filas los panes cada sábado. (I Crónicas 9, 32)

  • También vinieron al refugio, donde estaba David, algunos de los hijos de Benjamín y Judá. (I Crónicas 12, 17)

  • También de Manasés se pasaron algunos a David, cuando éste iba con los filisteos a la guerra contra Saúl, aunque no les ayudaron, porque los tiranos de los filisteos, habido consejo, le despidieron, diciendo: «Se pasará a Saúl, su señor, con nuestras cabezas.» (I Crónicas 12, 20)

  • Cuando regresó a Siquelag, pasáronse a él algunos de los hijos de Manasés: Adná, Yozabad, Yediel, Miguel, Yozabad, Elihú y Silletay, jefes de millares de Manasés. (I Crónicas 12, 21)

  • y al cabo de algunos años bajó a visitarle a Samaría. Ajab sacrificó gran número de ovejas y de bueyes para él y la gente que le acompañaba; y le incitó a que subiese con él contra Ramot de Galaad. (II Crónicas 18, 2)

  • Después de esto, los moabitas y ammonitas, y con ellos algunos maonitas, marcharon contra Josafat para atacarle. (II Crónicas 20, 1)


“A sua casa deve ser uma escada para o Céu”. São Padre Pio de Pietrelcina