Encontrados 177 resultados para: oye

  • ¿Dónde están tus sabios? ¡Vamos, que te anuncien y te den a conocer lo que el Señor de los ejércitos ha proyectado contra Egipto! (Isaías 19, 12)

  • La tierra de Judá será el espanto de Egipto: cada vez que se la mencione, Egipto temblará a causa del designio que el Señor ha proyectado contra él. (Isaías 19, 17)

  • "¿A quién pretende instruir y hacerle comprender lo que él oye? ¿A niños recién destetados, que acaban de dejar el pecho? (Isaías 28, 9)

  • Ay de los que traman secretamente para ocultar sus proyectos al Señor, de los que actúan en la oscuridad y dicen: "¿Quién nos ve y quién nos conoce?". (Isaías 29, 15)

  • No se obnubilarán los ojos de los que ven y los oídos de los que oyen estarán atentos; (Isaías 32, 3)

  • ¿Quién entre ustedes teme al Señor y escucha la voz de su Servidor? Aunque camine en las tinieblas, sin un rayo de luz, que confíe en el nombre del Señor y se apoye en su Dios. (Isaías 50, 10)

  • Escuchen bien esto, pueblo estúpido y sin inteligencia: ellos tienen ojos y no ven, tienen oídos y no oyen. (Jeremías 5, 21)

  • Como un pozo hace brotar sus aguas, así ella hace brotar su maldad. "¡Violencia, atropello!", se oye decir allí, tengo siempre delante las heridas y los golpes. (Jeremías 6, 7)

  • Porque se oye desde Sión el rumor de los gemidos: "¡Cómo hemos sido devastados, cubiertos de vergüenza! Tenemos que abandonar el país, porque han derribado nuestros hogares". (Jeremías 9, 18)

  • Y ahora, habla en estos términos a los hombres de Judá y a los habitantes de Jerusalén: Así habla el Señor: Miren que yo fabrico contra ustedes una desgracia y medito contra ustedes un proyecto. Vuelvan de su mal camino, enmienden su conducta y sus acciones. (Jeremías 18, 11)

  • ¡Préstame atención, Señor, y oye la voz de los que me acusan! (Jeremías 18, 19)

  • Los sacerdotes, los profetas y todo el pueblo oyeron a Jeremías mientras él pronunciaba estas palabras en la Casa del Señor. (Jeremías 26, 7)


“A caridade é o metro com o qual o Senhor nos julgará.” São Padre Pio de Pietrelcina