Encontrados 185 resultados para: fiesta de la Pascua

  • El rey dio esta orden a todo el pueblo: "Celebren una Pascua en honor del Señor, su Dios, como está escrito en este libro de la Alianza". (II Reyes 23, 21)

  • Porque no se había celebrado una Pascua como aquella desde el tiempo en que los Jueces habían gobernado a Israel, ni durante todo el tiempo de los reyes de Israel y de Judá. (II Reyes 23, 22)

  • Fue en el año decimoctavo del rey Josías cuando se celebró esta Pascua en honor del Señor, en Jerusalén. (II Reyes 23, 23)

  • Todos los hombres de Israel se reunieron junto al rey durante la Fiesta del séptimo mes. (II Crónicas 5, 3)

  • En aquella ocasión, Salomón, y con él todo Israel, celebró la Fiesta durante siete días. Se congregó una asamblea inmensa, venida desde la Entrada de Jamat hasta el Torrente de Egipto. (II Crónicas 7, 8)

  • Al octavo día, tuvo lugar una asamblea solemne, porque habían celebrado la dedicación del altar durante siete días y la Fiesta durante otros siete días. (II Crónicas 7, 9)

  • Según el rito de cada día, ofrecía lo que había mandado Moisés para los sábados, los novilunios y las tres solemnidades anuales, a saber: la fiesta de los Ácimos, la fiesta de las Semanas y la fiesta de las Chozas. (II Crónicas 8, 13)

  • Y al ver al rey de pie sobre el estrado, junto a la entrada, a los jefes y las trompetas junto al rey, a todo el pueblo que estaba de fiesta y tocaba las trompetas, y a los cantores que dirigían las aclamaciones con sus instrumentos musicales, rasgó sus vestiduras y gritó: "¡Traición! ¡Traición!". (II Crónicas 23, 13)

  • Entonces Ezequías dio órdenes a todo Israel y Judá, y también escribió cartas a Efraím y a Manasés para que acudieran a la casa del Señor, en Jerusalén, a celebrar la Pascua en honor del Señor, el Dios de Israel. (II Crónicas 30, 1)

  • El rey, sus jefes y toda la asamblea de Jerusalén se pusieron de acuerdo para celebrar esta Pascua en el segundo mes, (II Crónicas 30, 2)

  • y decidieron anunciarlo a todo Israel, desde Berseba hasta Dan, para que fueran a celebrar la Pascua en honor del Señor, el Dios de Israel, en Jerusalén, porque la mayoría no la había celebrado como estaba prescrito. (II Crónicas 30, 5)

  • Una gran multitud se reunió en Jerusalén para celebrar la fiesta de los Ácimos en el segundo mes: fue una asamblea muy numerosa. (II Crónicas 30, 13)


“Seja paciente nas aflições que o Senhor lhe manda.” São Padre Pio de Pietrelcina