Encontrados 285 resultados para: ejércitos

  • Porque así habla el Señor de los ejércitos: ¡Talen sus árboles, levanten terraplenes contra Jerusalén! ¡Es la ciudad de la mentira, dentro de ella, todo es opresión! (Jeremías 6, 6)

  • Así habla el Señor de los ejércitos: Rebusca como si fuera una viña al resto de Israel; vuelve a pasar tu mano como el vendimiador sobre los pámpanos. (Jeremías 6, 9)

  • Así habla el Señor de los ejércitos, el Dios de Israel: Enmienden su conducta y sus acciones, y yo haré que ustedes habiten en este lugar. (Jeremías 7, 3)

  • Así habla el Señor de los ejércitos, el Dios de Israel: ¡Añadan holocaustos a sus sacrificios y cómanse la carne! (Jeremías 7, 21)

  • La muerte será preferible a la vida para todos los sobrevivientes que hayan quedado de esa familia perversa, en todos los lugares adonde yo los expulsaré -oráculo del Señor de los ejércitos-. (Jeremías 8, 3)

  • Por eso, así habla el Señor de los ejércitos: Yo voy a depurarlos y a probarlos, porque ¿qué puedo hacer ante su maldad? (Jeremías 9, 6)

  • Por eso, así habla el Señor de los ejércitos, el Dios de Israel: Yo les haré comer ajenjo y les daré de beber agua envenenada. (Jeremías 9, 14)

  • Así habla el Señor de los ejércitos: ¡Atención! ¡Llamen a las plañideras, y que vengan! ¡Manden a buscar a las más expertas, y que vengan! (Jeremías 9, 16)

  • Pero no es como ellos la Parte de Jacob, porque él ha modelado todas las cosas; Israel es la tribu de su herencia, su nombre es: "Señor de los ejércitos". (Jeremías 10, 16)

  • El Señor de los ejércitos, que te había plantado, anuncia una desgracia contra ti, a causa del mal que la casa de Israel y la casa de Judá han cometido para agraviarme, quemando incienso en honor de Baal. (Jeremías 11, 17)

  • El Señor de los ejércitos me lo ha hecho saber y yo lo sé. Entonces tú me has hecho ver sus acciones. (Jeremías 11, 18)

  • Señor de los ejércitos, que juzgas con justicia, que sondeas las entrañas y los corazones, ¡que yo vea tu venganza contra ellos, porque a ti he confiado mi causa! (Jeremías 11, 20)


“O amor tudo esquece, tudo perdoa, sem reservas.” São Padre Pio de Pietrelcina