Encontrados 576 resultados para: descendientes de Aarón

  • Si tus descendientes observan mi alianza y los preceptos que yo les enseñaré, también se sentarán sus hijos en tu trono para siempre". (Salmos 132, 12)

  • Es como el óleo perfumado sobre la cabeza, que desciende por la barba -la barba de Aarón- hasta el borde de sus vestiduras. (Salmos 133, 2)

  • Pueblo de Israel, bendice al Señor; familia de Aarón, bendice al Señor; (Salmos 135, 19)

  • y decidieron acabar con los descendientes de Jacob que vivían entre ellos. Por eso comenzaron a matar y exterminar a mucha gente del pueblo. (I Macabeos 5, 2)

  • Judas hizo la guerra contra los descendientes de Esaú que habitaban en Idumea, en la región de Acrabatena, porque tenían asediados a los israelitas. Les infligió una gran derrota, sometiéndolos y apoderándose de sus despojos. (I Macabeos 5, 3)

  • Luego se acordó de la maldad de los descendientes de Beán, que eran una trampa y un obstáculo para el pueblo por las emboscadas que le tendían en los caminos. (I Macabeos 5, 4)

  • Judas salió con sus hermanos para hacer la guerra a los descendientes de Esaú, en la región meridional. Se apoderó de Hebrón y de sus poblados, destruyó sus fortificaciones e incendió las torres de su alrededor. (I Macabeos 5, 65)

  • porque decían: "El que ha venido con el ejército es un sacerdote de la familia de Aarón: él no nos va a traicionar". (I Macabeos 7, 14)

  • Al cabo de muchos años, cuando Dios así lo dispuso, Nehemías, enviado por el rey de Persia, mandó a los descendientes de aquellos sacerdotes que habían ocultado el fuego que fueran a buscarlo. (II Macabeos 1, 20)

  • El que confía en ella la recibirá en herencia y sus descendientes también la poseerán. (Eclesiástico 4, 16)

  • Escucha, Señor, la oración de los que te suplican, conforme a la bendición de Aarón sobre tu pueblo, (Eclesiástico 36, 16)

  • Por eso, Dios le aseguró con un juramento que las naciones serían bendecidas en su descendencia, que lo multiplicaría como el polvo de la tierra, que exaltaría a sus descendientes como las estrellas, y les daría en herencia el país, desde un mar hasta el otro y desde el Río hasta los confines de la tierra. (Eclesiástico 44, 21)


“Nunca se canse de rezar e de ensinar a rezar.” São Padre Pio de Pietrelcina