Encontrados 102 resultados para: atención

  • ¡Préstenme atención, pueblos, y ustedes, naciones, óiganme bien, porque de mí saldrá la Ley y mi derecho será la luz de los pueblos! En un instante (Isaías 51, 4)

  • Presten atención y vengan a mí, escuchen bien y vivirán. Yo haré con ustedes una alianza eterna, obra de mi inquebrantable amor a David. (Isaías 55, 3)

  • El justo desaparece y a nadie le llama la atención; los hombres de bien son arrebatados, sin que nadie comprenda que el justo es arrebatado a consecuencia de la maldad. (Isaías 57, 1)

  • ¿De quién tenías miedo, a quién temías, para mentir y no acordarte de mí, para no prestarme ninguna atención? ¿Será porque me quedé callado y cerré los ojos que tú no me temes? (Isaías 57, 11)

  • ¿A quién hablar, a quién advertir para que escuchen? Sus oídos están incircuncisos, no pueden prestar atención; la palabra del Señor se ha convertido en un oprobio para ellos, ¡no la quieren! (Jeremías 6, 10)

  • Yo suscité para ustedes centinelas: "Presten atención al toque de la trompeta". Pero ellos dijeron: "¡No prestaremos atención!". (Jeremías 6, 17)

  • Yo escuché con la mayor atención: ellos no hablan como es debido, ni uno solo se arrepiente de su maldad, diciendo: "¿Qué es lo que hice?". Todos vuelven a sus andanzas, como un caballo que se lanza al combate. (Jeremías 8, 6)

  • Así habla el Señor de los ejércitos: ¡Atención! ¡Llamen a las plañideras, y que vengan! ¡Manden a buscar a las más expertas, y que vengan! (Jeremías 9, 16)

  • ¡Escuchen y presten atención, no sean altaneros, porque ha hablado el Señor! (Jeremías 13, 15)

  • Ellos dijeron: "¡Vengan, tramemos un plan contra Jeremías, porque no le faltará la instrucción al sacerdote, ni el consejo al sabio, ni la palabra al profeta! Vengan, inventemos algún cargo contra él, y no prestemos atención a sus palabras". (Jeremías 18, 18)

  • ¡Préstame atención, Señor, y oye la voz de los que me acusan! (Jeremías 18, 19)

  • Pero ¿quién de ellos asistió al consejo del Señor para ver y escuchar su palabra? ¿Quién prestó atención y oyó su palabra? (Jeremías 23, 18)


“O Senhor se comunica conosco à medida que nos libertamos do nosso apego aos sentidos, que sacrificamos nossa vontade própria e que edificamos nossa vida na humildade.” São Padre Pio de Pietrelcina