Encontrados 502 resultados para: altar de bronce

  • Luego Moisés edificó un altar, al que llamó "El Señor es mi estandarte". (Exodo 17, 15)

  • Me harás un altar de tierra, y sobre él ofrecerás tus holocaustos y tus sacrificios de comunión, tus ovejas y tus bueyes. Vendré y te bendeciré en cualquier lugar donde yo haga que se recuerde mi Nombre. (Exodo 20, 24)

  • Si me edificas un altar de piedra, no lo harás con piedras talladas, porque al trabajarlas con el hierro, las profanarás. (Exodo 20, 25)

  • Tampoco subirás por gradas a mi altar, para que no se vea tu desnudez. (Exodo 20, 26)

  • Pero si alguien tiene la osadía de matar alevosamente a su prójimo, hasta de mi altar deberás sacarlo para que muera. (Exodo 21, 14)

  • Moisés consignó por escrito las palabras del Señor, y a la mañana siguiente, bien temprano, levantó un altar al pie de la montaña y erigió doce piedras en representación de las doce tribus de Israel. (Exodo 24, 4)

  • Moisés tomó la mitad de la sangre, la puso en unos recipientes, y derramó la otra mitad sobre el altar. (Exodo 24, 6)

  • Las ofrendas que recogerán son estas: oro, plata y bronce; (Exodo 25, 3)

  • Además, harás cincuenta ganchos de bronce y los introducirás en las presillas: así unirás la carpa, de manera que forme un todo. (Exodo 26, 11)

  • Y para sostener la cortina harás cinco columnas de madera de acacia revestidas de oro; sus ganchos también serán de oro, y las apoyarás sobre bases de bronce fundido. (Exodo 26, 37)

  • Luego harás el altar de madera de acacia; medirá dos metros y medio de largo por dos metros y medio de ancho -es decir, será cuadrado- y tendrá un metro y medio de alto. (Exodo 27, 1)

  • En sus cuatro ángulos, y formando una sola pieza con él, le harás unos cuernos. Después lo revestirás de bronce. (Exodo 27, 2)


“Resigna-te a ser neste momento uma pequena abelha. E enquanto esperas ser uma grande abelha, ágil, hábil, capaz de fabricar bom mel, humilha-te com muito amor perante Deus e os homens, pois Deus fala aos que se mantêm diante dele humildemente”. São Padre Pio de Pietrelcina